Sassa de Osma entrevista a Mathilde Favier, de Dior Couture: "Nunca hay que juzgar a una actriz antes de conocerla"

Esta parisina se caracteriza por su discreción, a cualquier pregunta que le sometemos con un nombre propio de por medio en esta primaveral mañana en Madrid, esquiva la respuesta de una forma elegante y única. Porque los que tienen las mejores agendas, las tienen, porque saben atesorar grandes secretos. Imagina su agenda plagada de nombres y contactos que van desde Charlize Theron a Emma Watson, pero los mejores son esos que no se reconocen a primera vista. Esta noción de calidad y belleza, tan profundamente arraigada en su ADN, no ha hecho más que fortalecerse gracias a un contacto más estrecho gracias a su carrera en el mundo del lujo.

Ha venido esta semana a Madrid a presentar su nuevo libro ‘Living Beautifully in Paris’, en el cual desgrana cómo es su vida en la capital francesa de la mano de su familia y amigos y su trabajo, sus anclas. "Pensé en este libro como una manera de preservar mi particular idea de París y de un art de vivre que me ha sido transmitido. Los usos y costumbres familiares de mi infancia parisina todavía están conmigo, moldeando mi forma de ser, y quería regalárselos a las generaciones futuras. Las consignas de mi educación podrían ser amor, calidad, refinamiento y belleza, pero también libertad. La libertad de expresión importaba y nada era tabú". En casa, mi madre nunca dejaba la mantequilla en su envoltorio ni las etiquetas de precio en nada, siempre se aseguraba de que enviáramos notas de agradecimiento escritas a mano y hacía suyo el lema de mi abuelo: "No soy lo suficientemente rico como para escatimar". Todo lo que compró fue de buena calidad y nos inculcó su gran amor por el entretenimiento. Estábamos rodeados de cosas hermosas".

Sobrina de Gilles Dufour, uno de los estilistas y directores de arte más famosos del mundo, fue el que la introdujo en la adolescencia en el mundo de la moda y el que la ha ayudado a construir su carrera profesional. En estas páginas que son un repaso por los fundamentales de su vida está Victoire de Castellane, la diseñadora de joyas de la maison en la que trabaja, la modelo y empresaria de moda, la etíope, Liya Kebede. También libreros, floristas o diseñadoras como Maria Grazia Chiuri o Vanessa Seward (ex-Azzaro), galeristas, y los mejores puestos del Mercado de las Pulgas. Un mapa de nombres e ideas que definen muy bien al personaje.

Entrevistada por Alessandra de Osma nos ha abierto su universo, y las claves de su vida parisina, que personifica perfectamente desde tiendas, casas y personalidades imprescindibles que la han acompañado hasta donde está hoy. Un libro que empezó como una aventura y que se va a convertir en un clásico del ‘art de vivre’.

Sassa de Osma: ¿Cómo nació la idea de este libro?

Mathilde Favier: Hace diez años conocí un psíquico que me dijo que iba a escribir un libro, yo en aquel momento no le hice caso, pero hace poco me lo propusieron los de la editorial Flammarion y no pude decir que no. Lo he construido como un álbum de recortes. Como un álbum de fotos familiar. Pero yo quería eso. Quería que la gente se viera como es, naturalmente Fue muy emotivo cuando fui a Flammarion, hace dos meses y vi todas esas máquinas imprimiendo por todas partes. Y me sentí muy emocionada porque lo que hemos hecho.

Sassa de Osma: ¿Qué encuentras de París fuera de París?

Mathilde Favier: Para mí París es único. He tenido la oportunidad de viajar alrededor de toda Europa, también a Nueva York, he vivido en Suiza, mis hijos se han criado en Londres y siempre que vuelvo lo encuentro particular y quería que esto fuera un reflejo de ello, un testimonio de mi París.

Sassa de Osma: Has tenido muchas experiencias con mucha gente conocida… ¿Qué has aprendido al tratar con ellas?

Mathilde Favier: Que nunca hay que juzgar a una actriz antes de conocerla, y menos hablar de ella mal. Cuando empiezo a tratar con una de ellas, sé que hay que darles atención y cariño, la admiración es la herramienta a través de la que pueden hacer su trabajo. No sabes nunca por lo que han pasado en su vida. Y luego, cuando ya se abren, descubres historias que no podías imaginar. No las debemos juzgar por su físico, ni por lo que creemos que sabemos de ellas.

Sassa de Osma: ¿Nos puedes contar alguna anécdota divertida que te haya sucedido con una de ellas?

Mathilde Favier: Hace unos meses estábamos vistiendo a Emma Watson para un festival de cine y al vestirla nos dimos cuenta de que el vestido no llevaba foro y era totalmente transparente. No sabíamos qué hacer y se me ocurrió que quizá podríamos hacer uno con las cortinas del hotel, y así fue, la actriz recogió el premio ganador con un vestido transformado en el último minuto de la tarde con cortinas del Hotel Majestic.

Una vida llena de anécdotas de las que solo cuenta con cuentagotas, ese es el secreto de su éxito. Ojalá un segundo libro, que dice que ya está preparando, sobre algunas de ellas.