De Emma Stone a Ana de Armas: los V.I.P. no se pierden el desfile de otoño invierno de Louis Vuitton

Louis Vuitton ha acaparado titulares estos días, pero no ha sido en la sección de moda de los medios, como es costumbre. Nos ha sorprendido copando textos en la sección de belleza, porque después de años de colaboraciones en los desfiles de Louis Vuitton, la pionera de la belleza Pat McGrath será la directora creativa de la línea de maquillaje de la enseña francesa.

La hemos podido ver estos días previos al desfile sentados con Nicolas Ghesquière para conversar de forma divertida sobre cómo mantienen la magia viva entre bastidores, desglosando el proceso artístico de creación de looks de maquillaje deslumbrantes.

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Igual que los looks que hemos visto sobre la pasarela, Ghesquiére presentó una audaz propuesta para esta temporada, confirmando que la creatividad y el eclecticismo dominan las pasarelas. Las tendencias destacadas se construyen alrededor de varios ejes clave, entre ellos una fuerte apuesta por los contrastes, texturas llamativas y siluetas voluminosas, lo que define un estilo contemporáneo e innovador.

En primer lugar, destaca el uso del layering, una técnica que combina prendas de diversos estilos y grosores en un mismo look. Vemos superposiciones de chaquetas oversize con vestidos ligeros y transparencias que aportan frescura y versatilidad. El juego con transparencias, en prendas negras y combinadas con colores vibrantes como el rojo y verde, ofrece un toque sofisticado y futurista.

Otro elemento dominante es la presencia de estampados cuadros en distintos tamaños y colores, especialmente en blanco y negro o rojo y negro. Esta propuesta, que recuerda ligeramente al estilo grunge, aparece reinterpretada de manera elegante, acompañada de prendas en cuero y faldas con vuelos. Las siluetas son fluidas, aunque no faltan estructuras arquitectónicas en los abrigos y chaquetas, que aportan contundencia y elegancia urbana.

La colección también se caracteriza por su inclinación hacia lo romántico y vintage, vista en vestidos florales largos con aire bohemio. Esta estética convive armónicamente con prendas más audaces y contemporáneas, como abrigos oversize en piel sintética y cuero, además de botas arrugadas en tonos tierra que rompen con la formalidad, reafirmando una estética ecléctica y juvenil.

Los tonos predominantes varían desde negros profundos, pasando por intensos rojos, hasta verdes suaves y tierra que aportan calidez a la paleta cromática. El rojo cobra protagonismo, tanto en prendas casuales como en vestidos elegantes con detalles brillantes que otorgan dramatismo y modernidad.

La propuesta formal llega con diseños más estructurados, como trajes y vestidos con geometrías marcadas y toques futuristas en gris, blanco y detalles metálicos que sugieren un equilibrio entre elegancia y audacia. Finalmente, accesorios como bolsos estructurados y sombreros amplios redondean los estilismos, demostrando que el lujo contemporáneo está en los detalles.

Y no podemos olvidar a personalidades que le han acompañado como:

Jennifer Connelly

Ana de Armas

Alicia Vikander

Sophie Turner

Lea Seydoux

Jaden Smith

Saoirse Ronan

Chloé Grace Moretz

Louis Vuitton ha logrado así una colección potente, actual, capaz de adaptarse a distintas personalidades y momentos, marcando claramente la ruta para las próximas temporadas con audacia, sofisticación y una marcada identidad urbana.