35 años de 'Pretty Woman': analizamos el famoso vestido de lunares y otros looks icónicos de la película

Aquel 23 de marzo de 1990, cuando 'Pretty Woman' llegó a las salas de cine estadounidenses, ni el director, Garry Marshall, ni los productores o el reparto, esperaban el éxito y la repercusión que la película suscitaría. Darle la vuelta al cuento clásico de la Cenicienta, con una prostituta como protagonista y un galán tan millonario como solitario, resultó ser un triunfo en el cine comercial de la época y mucho más, una película que ha trascendido en el tiempo y que sigue arrasando en audiencia cada vez que salta a la parrilla televisiva.

Varias fueron las claves de este éxito transgeneracional. Desde la historia y el guion, un romance atípico con un desenlace esperado y deseado, pasando por la química entre la pareja formada por Richard Gere y Julia Roberts, encarnando en su primer filme juntos a Edward Lewis y Vivian Ward respectivamente, y terminando en el diseño de vestuario a cargo de Marilyn Vance. Igual desconoces que todos y cada uno de los looks que lució la actriz de la sonrisa eterna fueron diseñados y cosidos por la mencionada estilista para la película. Algunos de ellos (por no decir todos) son iconos de la moda y del cine. Para celebrar el 35 aniversario de 'Pretty Woman', descubrimos los secretos detrás del vestido de lunares y otros atuendos legendarios del filme.

El vestido de lunares

Entre tanto outfit inolvidable, destaca una prenda que se ha convertido en un icono vivo de la moda y que no es otra que el famoso vestido de lunares. Replicado y versionado por cientos de marcas y diseñadores, este modelo de corte sencillo, patrón evasé y tejido satinado marrón con estampado de topos blancos, se ideó basándose en el guion. El 'dress code' de la escena no podía ser más claro: una jornada de día en el polo. Para recrear un look a la altura, Vance encontró un tejido de lunares rebuscando en unos almacenes de moda. Era el tejido, ¿la pega? Que no era suficiente para confeccionar la idea inicial que el equipo de diseño tenía en mente. Por lo que no quedó más remedio que ajustar el largo inicial, que en un primer momento se concibió rozando los tobillos, a una altura que quedaba justo por debajo de las rodillas. Solo así lograron dejar un sobrante de tejido para adornar la pamela de rafia que también lució en esa misma secuencia Julia Roberts. ¿El resultado? Un total look con una sintonía cromática a dúo en marrón y blanco que se convirtió en un acierto.

El vestido rojo de gala

Asumido el impacto estilístico que el vestuario de 'Pretty Woman' ha tenido en la historia de la moda, toca el turno de adentrarnos en el vestido de gala rojo. Un modelo largo con los hombros descubiertos, escote con abertura, drapeados en el cuerpo y un pliegue estratégico en la falda que es inconfundible que la protagonista llevó para una cita romántica en la ópera. Con la escena detallada y concretada sobre el papel, Garry Marshall, el director de la película, quería que esta prenda fuera negra y no contempla la idea de cambiar de color al rojo. Pero Vance defendió con uñas y dientes su idea inicial de dotar a este vestido del color más pasional de la paleta cromática.

"Sabía que tenía que ser rojo, así que luché por ello. Gary también quería que fuera un vestido de gala, pero sabía que eso era demasiado, nadie se acercaría a ella así. Así que lo emparejé. Revisamos cuatro diseños para hacerlo bien, y apenas nos quedaba tela para el final, pero salió adelante y el resultado fue simplemente espectacular", reveló Marilyn Vance en una entrevista posterior a la película.

El vestido 'cut-out'

Con este look conocimos a Vivian Ward. Ella esperaba en las calles de Hollywood Boulevard la llegada de algún cliente y de pronto se topó con el multimillonario Edward Lewis. "Al principio, en la primera escena, llevaba puestas muchas cosas: una chaqueta, esas botas, el sombrero, todo muy cargado. En cada estilismo sucesivo comienzas a verle adoptar la dirección de 'menos es más'. Para el final, es muy sencilla: pura sofisticación", contó la estilista sobre este primer look. Marilyn Vance tenía claro que quería conseguir: llamar la atención del espectador con un atuendo impactante repleto de elementos y después, crear y dar forma al personaje con una depuración de su imagen y su manera de vestir.

Bajo la americana de corte oversize granate, un vestido atrevido y muy llamativo. 'Cut-out' blanco y azul con una arandela metalizada en el eje central, un modelo atrevido, sexy y moderno que ahora podría ser tendencia. Aunque parece sacado de alguna tienda de ropa barata, en realidad estaba inspirado en un traje de baño de los años 60 que formaba parte del guardarropa de Vance. Una boina y unas botas XXL de charol completaron el outfit.

El vestido blanco del arrepentimiento

Apodado por muchos como el vestido de 'la venganza', es ese que la actriz llevó para volver a la tienda de lujo de Rodeo Drive donde fue rechazada días antes por su aspecto e indumentaria, fue, en la práctica, toda una declaración de intenciones. Una declaración de intenciones y una lección de educación para la dependienta del establecimiento que, al ver a Vivian enfundada en ese elegante vestido blanco con botonadura frontal vintage, se arrepintió de no atenderla.

Es la prueba clara de la evolución estilista que el personaje experimenta a lo largo de la cinta y que muta hacia un armario con clase y sofisticado. Cuello redondo, manga corta abullonada, patrón con ejes centrales y botones decorativos, en un vestido blanco que, como los otros, ha sido imitado hasta la saciedad.