De Zendaya a Kate Middleton: los 9 mejores looks de Wimbledon
Entre cables dorados, lunares elegantes y trajes de dos piezas, este torneo es también una cumbre de la moda silenciosa y elegante
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Wimbledon es mucho más que un Grand Slam: es un desfile silencioso de estilo donde el blanco reglamentario de los jugadores se convierte en una declaración de intenciones, y la grada rivaliza con la pasarela. Porque si hay un deporte donde la estética importa casi tanto como la técnica, ese es el tenis. De hecho, podríamos afirmar sin pudor que este torneo es el verdadero front row del verano británico.
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Desde la elegancia clásica de Lady Di hasta el guiño cinematográfico de Zendaya en plena gira promocional de Challengers, este torneo ha acogido algunos de los estilismos más memorables de las últimas décadas. Aquí, nuestra selección de los mejores looks de todos los tiempos que esperamos que se amplíen a partir de esta tarde:
Lady Di, 1993
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El epítome del estilo royal. Diana de Gales asistió al torneo con un traje de falda rosa pastel que conjugaba formalidad, dulzura y un toque de modernidad adelantado a su época. El color, muy poco habitual en Wimbledon, resaltaba su bronceado veraniego y su porte impecable. Un look que todavía inspira.
Zendaya, 2024
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Convertida en musa tenística gracias a su papel en Challengers, Zendaya supo aprovechar la cita con el estilo que la caracteriza. Con un conjunto que evocaba el blanco inmaculado de la pista sin renunciar a una silueta sofisticada, elevó el concepto de “temática deportiva” a una nueva dimensión de glamour.
Roger Federer, 2008
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Sí, hablamos de un jugador, pero su entrada a la pista central con un cárdigan de punto trenzado color crema con ribetes dorados merece mención. El suéter se volvió icónico al instante, y su audacia sartorial puso el listón muy alto para el tenniscore masculino.
Sienna Miller, 2022
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La actriz británica sabe cómo vestirse. Su look dos piezas de seda y lunares era informal pero calculado, romántico, sin empalagar. Una elección perfecta para el verano londinense.
Meghan Markle, 2018
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Para su debut como duquesa en Wimbledon, Meghan optó por un conjunto effortless en blanco y azul que combinaba camisa de rayas y pantalones palazzo. Chic, moderno y con el guiño justo a su nueva vida como royal.
Emma Corrin
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Otra fan del “butter yellow”, un color que parece hecho para Wimbledon. Con su estilo fluido, Corrin logra que un simple look pastel se convierta en una declaración de individualidad.
Kate Middleton, 2024
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La firma inglesa Self Portrait la vistió con un dos piezas lima con falda plisada y chaqueta de manga corta con botones y un clutch de Emmy London.
Margot Robbie, 2024
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Embarazada y radiante, Robbie optó por un vestido de lunares de Alaïa que combinaba el glamour de antaño con la comodidad necesaria. Un look que demuestra que la elegancia no entiende de estados.
Queen Elizabeth II, 1962
Pocas veces se habla de la reina como icono de estilo, pero su abrigo de vuelo al presentar el trofeo ese año era pura sofisticación británica. Sutil, distinguido y absolutamente memorable.
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Wimbledon demuestra cada año que las gradas y las pistas pueden ser tan influyentes como las pasarelas de París o Milán. Entre cables dorados, lunares elegantes y trajes de dos piezas, este torneo es también una cumbre de la moda silenciosa y elegante. Y aunque los puntos se ganen con raqueta, los fashion wins los dan el ojo y la actitud.
Wimbledon es mucho más que un Grand Slam: es un desfile silencioso de estilo donde el blanco reglamentario de los jugadores se convierte en una declaración de intenciones, y la grada rivaliza con la pasarela. Porque si hay un deporte donde la estética importa casi tanto como la técnica, ese es el tenis. De hecho, podríamos afirmar sin pudor que este torneo es el verdadero front row del verano británico.