Nicole Kidman no fue la protagonista: sus hijas acaparan todas las miradas en el desfile de Chanel

Anoche Chanel marcó un antes y un después en su historia. Para el primer desfile Matthieu Blazy al frente de la maison francesa, el Grand Palais se transformó en un paisaje lunar por el que las modelos avanzaron entre destellos plateados y reflejos cósmicos como el preludio perfecto del inicio de una nueva era. En la práctica, el desfile fue una sucesión de contrastes sin perder de vistas los emblemas de la casa como el tejido de tweed o los acabados joya. Una colección espectacular en cuerpo y alma con una energía renovada, más libre y audaz, que reinterpreta los códigos clásicos de Coco y Karl desde una mirada contemporánea.

Un nuevo paradigma que se hizo latente en el 'front row'. Las celebs que se sentaron en las primeras filas, algunas viejas amigas de Chanel como Penélope Cruz y Carlota Casiraghi, y otras nuevas, como Úrsula Corbero y Ayo Edebiri, bajaron el nivel de sofisticación con el tejido vaquero como protagonista de sus looks. Entre esos nuevos fichajes destacó Nicole Kidman.

Al tiempo que su mediático divorcio con Keith Urban avanza en los tribunales, la actriz puso un pie en el 'show' de Chanel presentándose como nueva embajadora. En realidad, el vínculo con la firma no es nuevo y se remonta desde su recordada campaña del perfume N.º 5 en 2004. "Nicole siempre ha sido parte de la historia de la casa. Libre y cambiante, encarna a la mujer Chanel. Reencontrarme con ella aquí es un sueño hecho realidad", ha dicho Matthieu Blazy.

Pero la realidad es que la actriz, ganadora de un Óscar y seis Globos de Oro, no fue la protagonista de esta película espacial: sus hijas acapararon todas las miradas en el desfile de Chanel.

Hagamos las presentaciones oficiales. Son Sunday Rose Kidman Urban y Faith Margaret Kidman Urban, las dos hijas que Nicole tuvo con el cantante a lo largo de sus 19 años de matrimonio.

La mayor, Sunday, de 17 años, es modelo y en su corta carrera ya ha desfilado para grandes de la moda como Miu Miu, o hace solo unos días, en el debut de Jonathan Anderson para Dior. La pequeña, Faith, de 15 años, busca seguir los pasos de su madre en el mundo de la interpretación. De momento ha participado con un papel menor en 'The Undoing' e hizo el doblaje de 'The Angry Birds Movie 2'. Sea como sea, estas dos jóvenes, le han robado el protagonismo a Nicole Kidman en el desfile de Chanel.

Con un común denominador en los looks de madre e hija, este es el tejido denim que, como hemos señalado, nutrió y dio forma a la mayoría de atuendos vistos en el 'front row', los contrastes fueron evidentes. El clasicismo y la atemporalidad del atuendo de Nicole Kidman, con camisa blanca masculina de corte oversize, chocó con las nuevas reglas de estilo que mandan en la generación de la que forman partes sus hijas.

Sunday Rose escogió un top de color rojo con escote en pico y sin mangas para combinar con sus jeans efecto desgastado en lavado azul suave, y Faith Margaret, un 'little black dress' junto a una chaqueta vaquera y bailarinas negras.

Además de ser el mejor apoyo de la actriz en este proceso de divorcio, sus hijas se han convertido en su fiel compañía y a juzgar por las imágenes, en las herederas de su estilo.