La ruta del vermut: peregrina a los mejores sitios donde tomarlo
El vermut está de moda. Si eres de los que siempre apreció este brebaje alcohólico, suponemos que ya sabes dónde tienes que peregrinar para encontrar los mejores. Si no, aquí tienes una lista.
:format(jpg)/f.elconfidencial.com%2Foriginal%2F65b%2Fb93%2Fbc4%2F65bb93bc456d21306120fac89f3399da.jpg)
Este vino macerado en hierbas con ajenjo y otras especias está viviendo una segunda juventud. Una de nuestras más queridas bebidas patrias ha sido rescatada por los hipsters y las nuevas generaciones que le han quitado su pátina cañí, para hacer de ella algo más que un brebaje. Y es que la hora del vermut se ha convertido en un dinamizador de las relaciones sociales. ¿Las razones? Haciendo sociología amateur se podrían apuntar muchas: desde que en los tiempos aciagos de crisis no resulta tan costoso como una comida o una cena, a que la cantidad de franquicias de diseño fotocopiadas ha hecho que los bares con aire castizo resulten exóticos. Sea como fuera, el vermut está aquí para quedarse y se puede brindar con él en…
Hasta colas hay para entrar en este establecimiento. El vermut combina perfectamente con las míticas croquetas (rumorean los mentideros que son las mejores de la capital) y con otros platos como el bacalao o el atún en escabeche.
Dónde:Tetuán, 12. Madrid.
El barrio de Poble Sec se está convirtiendo en un lugar de tapeo obligado en Barcelona. Este local lo sabe y tienta a sus parroquianos algunos domingos con su oferta vermut&concert, que permite dar unos tragos con buena música en vivo. La oferta de tapas es inacabable.
Dónde:Margarit, 54. Barcelona.
Casa Revuelta
En el barrio de los Austrias esta pequeña taberna invita al vemut y al tapeo. La elección para acompañar la bebida está bien surtida. Si tiene que elegir, la tajada de bacalao rebozado y los calamares en su tinta no tienen desperdicio. El domingo está hasta la bandera.
Dónde: Latoneros, 3. Madrid.
Montferry
Ante la fiebre por abrir establecimientos con aire añejo que siempre huelen a recién pintado, los tres socios de esta bodega mítica contraatacaron, haciéndose con un local mítico al que insuflaron nuevos bríos. El delicioso vemut casero se lleva muy bien con las variadas tortillas, el fricandó, las míticas croquetas o 'el bocadillo del día'.
Dónde: Violant d’Hongria, 105. Barcelona.
La Concha
¿Quién dijo que los celíacos no podían disfrutar de un buen vermut? Este establecimiento se encarga de ello, con una bebida sin gluten acompañada de tapas riquísimas que puede degustar cualquier celíaco.
Dónde:Cava Baja, 7. Madrid.
Morro Fi
Sus propietarios lo tuvieron claro: querían un lugar en el que rememorar los recuerdos (renuiones familiares) y los olores (vino con madera) de los domingos de su infancia. Y los reprodujeron en este local en el que destacan la variedad de vermuts (que también se pueden adquirir) y las conservas clásicas.
Dónde:Consell de Cent, 171. Barcelona.
Taberna El Vermut
Tras este local subyace una filosofía clara: recuperar tanto la tradición vermutera como guisos valencianos que estaban cayendo en el olvido. Y lo están consiguiendo con una carta llena de arroces y pastas para chuparse los dedos.
Dónde:Albalat dels Tarongers, 12. Valencia.
La Vemutería del Tano
Un establecimiento mítico, que abrió sus puertas en 1927 como bodega y tienda de aceite, que ha pasado de manos y que ahora lleva 21 años en las de sus propietarios, que han hecho del vermut su bandera.
Dónde: Joan Blanques, 17. Barcelona.
Este vino macerado en hierbas con ajenjo y otras especias está viviendo una segunda juventud. Una de nuestras más queridas bebidas patrias ha sido rescatada por los hipsters y las nuevas generaciones que le han quitado su pátina cañí, para hacer de ella algo más que un brebaje. Y es que la hora del vermut se ha convertido en un dinamizador de las relaciones sociales. ¿Las razones? Haciendo sociología amateur se podrían apuntar muchas: desde que en los tiempos aciagos de crisis no resulta tan costoso como una comida o una cena, a que la cantidad de franquicias de diseño fotocopiadas ha hecho que los bares con aire castizo resulten exóticos. Sea como fuera, el vermut está aquí para quedarse y se puede brindar con él en…