¿Se adelgazan 10 kilos en 14 días si se siguen las normas de la dieta Scardale?

Como tantas otras dietas milagro, la dieta Scardale te asegura una pérdida de peso grande y en poco tiempo solo si sigues las pautas que diseñó su creador, el cardiólogo estadounidense Herman Ternoveru.

Durante 14 días, la dieta Scardale regula tu alimentación en función de los nutrientes que consumes, que deben estar repartidos de la siguiente manera: 45% proteínas, 35% hidratos de carbono y 20% de grasas.

Se divide en dos fases, la primera dura dos semanas y es altamente restrictiva. El objetivo es consumir unas 1.000 calorías diarias, por ello se la considera una dieta hipocalórica. La segunda sería la de mantenimiento y en ella se pueden ampliar las dosis de los alimentos permitidos.

Normas de la dieta Scardale

Al tratarse de una dieta muy estricta, para conseguir los resultados prometidos es indispensable cumplir con sus normas a rajatabla. Una de las primeras es que solo se realizan tres comidas al día. No hay lugar para los almuerzos de media mañana o las meriendas.

Para evitar pasar hambre entre las comidas principales, recomienda únicamente tomar infusiones, que además aportan líquidos. Esta es otra de las normas que establece, tomar al menos dos litros de agua diarios, si bien esta es una regla saludable que incorporar aunque no se siga ninguna loca dieta, simplemente por salud.

Bebiendo ocho vasos de agua a lo largo del día estaremos ayudando a nuestro cuerpo a eliminar líquidos, evitando así que se acumulen y puedan hacernos sentir hinchadas.

Otra de las normas es: nada de aceite, ni para cocinar ni para aliñar. No es el único alimento que prohíbe, pero sí el más sorprendente. Otros son el alcohol o las bebidas azucaradas que no suelen recomendarse en ninguna dieta, saludable y progresiva o milagro.

Lo hace así porque quiere reducir al máximo la ingesta de grasas, independientemente de si son saludables o no. También prohíbe la mantequilla, margarina, aguacate... y solo permite carnes magras y las aves, sin piel.

Durante la primera etapa, se debe seguir un menú establecido. Además durante los 14 días que dura, desaconseja el ejercicio físico. Al producirse una ingesta calórica tan baja podría poner en riesgo tu salud.

Durante la segunda fase, que es la de mantenimiento, sí que se recomienda incorporar un poco de ejercicio aeróbico.

¿Realmente funciona?

En realidad, no es esa la pregunta que deberías hacerte, es más importante saber si es buena para ti. Su autor defiende que no compromete la salud y que consigue resultados visibles, pero también señala que solo la pueden llevar a cabo adultos sanos.

Por ello, lo mejor es ponerse en manos de médicos y especialistas nutricionistas antes de dar el paso de comenzar una dieta que suponga un cambio tan grande en tus rutinas. Sobre todo porque una dieta tan rica en proteínas puede sobrecargar tu riñón y provocarte debilidad, fatiga y mal humor a corto plazo, a largo mejor no pensarlo.

En general, los expertos recomiendan que para llevar una vida saludable lo mejor es una dieta equilibrada y ejercicio físico. No tengas prisa, con los hábitos adecuados acabarás llegando a tu peso saludable.