Elimina toxinas y pierde peso siguiendo la dieta de la naranja

Uno de los consejos que siempre nos dan a la hora de comenzar a cuidar nuestra alimentación es que no nos olvidemos de incorporar frutas y verduras a nuestra dieta. Son necesarias para mejorar la salud general y para evitar determinadas enfermedades, como las cardiopatías.

Si además las consumimos en una dieta baja en grasas, azúcares y sal, podremos prevenir el aumento de peso y disminuir el riesgo de obesidad. En definitiva, si queremos que nuestra dieta sea lo más saludable posible, no podemos dejar pasar la oportunidad de incorporar la fruta a la misma.

Entre las muchas frutas que podemos escoger para comenzar a disfrutar de nuestros nuevos hábitos de vida, la naranja está entre las más deseadas. Tal vez sea por su delicado sabor, entre el dulce y el amargo, o por su llamativo color, quizá por lo sencillo que nos resulta comerlas o porque están disponibles gran parte del año.

Lo cierto es que esta fruta es una gran fuente de vitamina C, una de las cosas que más se conoce sobre ella, pero esta no es la única cualidad de la que hace gala. Tiene propiedades diuréticas, antiácidas y depurativas, es estupenda a la hora de eliminar toxinas, gracias a su alto contenido en agua.

Ayuda a mejorar el aspecto de nuestra piel gracias a sus propiedades antioxidantes, aportadas por los beta-carotenos que también le dan su color naranja y que evitando el envejecimiento prematuro y nos ayudan a lucir estupendas durante más tiempo. También es rica en fibra, sobre todo en la parte blanca, que queda entre la pulpa y la corteza.

Naranjas para adelgazar

La dieta de la naranja difiere un poco de otros métodos depurativos de los que seguro has oído hablar porque no se basa en el consumo en exclusiva de esta fruta durante un tiempo determinado. Lo que propone es que incluyas en tu dieta 1 litro de zumo de naranja natural diario.

Por la mañana, en ayunas, toma medio litro de zumo, antes del desayuno. El otro medio se toma para merendar. Puedes incorporar también dos naranjas completas al día, en la comida y en la cena, así estarás sumando un poco más de fibra y consiguiendo mayor sensación de saciedad al tener que masticarlo.

Es imprescindible que el zumo sea natural y no envasado, por lo que no siempre resulta sencillo tener la posibilidad de seguir este régimen. Además tiene que estar recién exprimido, no puedes tomarlo del día anterior o hacerlo por la mañana para tomarlo por la noche.

Al tratarse de una fruta cítrica no conviene tomarlo justo antes de dormir, a última hora de la noche, porque puede llegar a provocar acidez.

Mientras tomas este litro de zumo de naranja diario, es recomendable que tus comidas sean ricas en verduras crudas y legumbres y que evites los dulces, la bollería, los refrescos azucarados y las bebidas alcohólicas, así como los ultraprocesados.

Lo mejor es que tu dieta sea lo más equilibrada posible, para que el efecto desintoxicante del zumo sea mayor. El zumo de naranja favorece el tránsito intestinal, evita el estreñimiento y favorece la digestión.

Recuerda siempre que, antes de tomar una decisión sobre tu alimentación que suponga un cambio en tu vida, y sobre todo cuando lo que buscas es perder peso, lo mejor que puedes hacer es consultar con un especialista. Evita poner en riesgo tu salud y confía en médicos y nutricionistas que son quienes mejor pueden ayudarte.