Descubre los ‘hollow rocks’, uno de los mejores ejercicios físicos para trabajar el abdomen

El ejercicio físico es una de las maneras más efectivas de sentirnos mejor con nosotras mismas. No solo porque nos sirve para tonificar nuestros músculos, lo que ya es un aliciente aunque no sea el motivo principal para llevar una vida más activa.

Los muchos beneficios que iremos notando en nuestro cuerpo, pero sobre todo en nuestra mente conforme convirtamos esta práctica en rutina son la clave para dar este paso y dejar de lado una vida sedentaria.

Las mejoras que sentimos cuando hacemos ejercicio físico son varias, algunas son inmediatas y otras tardarán más tiempo en hacerse visibles.

Por ejemplo, tras la primera sesión ya podremos sentir la sensación del trabajo bien hecho, que se multiplicará conforme sigamos entrenando de forma habitual.

Nos sentiremos más ligeras, más ágiles y más fuertes, notaremos cómo nuestro cuerpo funciona mejor, no solo nuestros músculos, también nuestro interior porque estaremos reforzando sistemas como el cardiovascular o el inmunológico.

También notaremos grandes mejoras a nivel psicológico, no solo por la serotonina que liberamos durante el ejercicio físico y que nos hace sentirnos mejor, también porque nos ayuda a despejar la mente y mantener los niveles de estrés bajo control.

Puede que pasado un tiempo te cueste mantener la emoción de los primeros días, una buena forma de que nada cambie es introducir nuevos ejercicios, como los ‘hollow rocks’.

¿En qué consiste este ejercicio físico?

Para realizarlo necesitaremos la ayuda de una esterilla o una pequeña colchoneta, para evitar hacernos daño en la espalda.Túmbate boca arriba sobre ella, con la espalda apoyada en el suelo. Mantén las piernas juntas y sin flexionar y los brazos a ambos lados de la cabeza, como si intentaras estirarte.

Manteniendo siempre la zona de la espalda baja apoyada en el suelo, eleva ligeramente las piernas, los brazos y la cabeza. La fuerza parte de la zona abdominal.

Es importante que domines esta postura antes de añadirle movimiento, no es un ejercicio sencillo por eso una buena idea es, antes de llegar más lejos, practicar manteniendo esta postura durante varios segundos.

Una vez que esto esté dominado, puedes añadir el balanceo para lo que solo tendrás que darte impulso una vez que adoptes la postura que te hemos descrito. El cuerpo debe moverse en conjunto y ni los pies ni la cabeza llegan a tocar el suelo.

Para realizar este ejercicio correctamente se necesita gran fuerza en la zona media, pero una vez que lo domines estarás trabajando para fortalecer tu core, (o sea, el área que engloba toda la región abdominal y parte baja de la espalda), los oblicuos y los flexores de la cadera. ¿Te animas con ellos?