Método del plato: la forma más sencilla y equilibrada de comer para adelgazar
Descubre una forma sencilla de conseguir que tus comidas sean lo más equilibradas posible
El intento de llevar una dieta equilibrada que nos ayude a perder un poco de peso no siempre nos resulta sencillo. A menudo asociamos adelgazar con contar calorías y, aunque sí que debemos tenerlo en cuenta, convertirlo en nuestra prioridad puede hacer de la hora de comer un momento tedioso y aburrido.
Si bien es cierto que la única manera de adelgazar es tomar menos calorías de las que quemamos, o quemar más calorías de las que consumimos, una forma muy visual y sencilla para aprender a comer de una forma equilibrada la podemos encontrar en el método del plato.
El método del plato se encarga de señalarnos las proporciones y las cantidades de cada tipo de alimentos que debe contener nuestro plato en las dos grandes comidas del día, un plato que debe ser de unos 23 centímetros de diámetro, más o menos.
Divide tu plato
Comienza trazando una línea imaginaria en tu plato, para dividirlo en dos mitades. Así, el 50 % debe estar destinado a las verduras y hortalizas, tanto cocidas como crudas, salteadas, hervidas o trituradas en cremas, intentando que sean variadas y de diferentes colores.
Una buena dosis de verdura te aportará la cantidad de vitaminas, minerales y fibra que necesitarás a lo largo del día. No dudes en incluir una amplia variedad, como calabaza, brócoli, zanahoria, pimientos, berenjena…
La otra mitad del plato debes dividirla de nuevo por la mitad. El 25 % se destina a carbohidratos, como pasta, pan y cereales, siempre mejor si son integrales. Es conveniente limitar el consumo de harinas refinadas que, al tener un mayor índice glucémico, provoca mayores picos de azúcar en sangre. En este cuarto también se incluyen las legumbres y las patatas.
El último cuarto es el que se dedica a las proteínas animales, de carnes de ave, pescados azules y blancos y huevos. La cantidad recomendada sería aproximadamente del tamaño de la palma de la mano. También en esta sección entrarían las opciones vegetarianas como el tofu o el seitán.
Algunos consejos más
Además de tu plato dividido en tres porciones, también tienes que incluir en tu comida una buena ración de frutas variadas y de temporada, así como beber abundante agua a lo largo del día. Convierte el agua en tu bebida principal, por encima de las bebidas azucaradas que debes evitar, y otras como el café y el té, que es mejor limitarlas.
Utiliza aceite de oliva para cocinar, toma dos o tres raciones diarias de lácteos e incorpora frutos secos, mejor sin sal. Emplea preparaciones que requieran poca grasa, como al vapor, al horno o a la plancha.
Si quieres emplear este sencillo sistema para conseguir perder un poco de peso, lo mejor es que, antes de lanzarte de lleno a probarlo, consultes con un médico o nutricionista. Con este sistema hay infinitas recetas que pueden llenar tu cocina de deliciosos olores y tu plato de ricos sabores y contar con su consejo y guía te ayudará a conseguir tus objetivos, adecuando tu dieta a ellos.
El intento de llevar una dieta equilibrada que nos ayude a perder un poco de peso no siempre nos resulta sencillo. A menudo asociamos adelgazar con contar calorías y, aunque sí que debemos tenerlo en cuenta, convertirlo en nuestra prioridad puede hacer de la hora de comer un momento tedioso y aburrido.