Dieta 911: te contamos qué es y cómo puedes adelgazar 4 kilos en dos semanas

Existen numerosas dietas que prometen ayudarnos a perder peso de forma rápida y efectiva. Precisamente una meta que también se pone la dieta 911 (como el teléfono de emergencias de EEUU), que asegura hacernos adelgazar en solo dos semanas entre 2 y 4 kilos, dependiendo de cada persona.

Se trata de una dieta exprés, es decir, una de esas que seguimos de forma puntual en un momento determinado de nuestras vidas en el que queremos perder peso, pero este será en su mayoría una pérdida de agua y líquidos, no de grasa como en el fondo esperamos.

No conviene alargarla en el tiempo, porque es bastante restrictiva; así, si una vez terminadas las dos semanas regresamos a nuestra alimentación habitual, corremos el riesgo de recuperar el peso perdido e incluso aumentarlo.

Por ello lo mejor es buscar soluciones a largo plazo, cambiando nuestros hábitos poco saludables por otros que lo sean un poco más. Para conseguirlo, lo mejor es ponernos en manos de expertos, que serán quienes nos ayuden a conseguir nuestras metas de una forma sana.

La dieta 911 es un método hipocalórico y rico en fibra; esto es, su base principal son alimentos bajos en grasas y calorías, pero también incorpora una mayor cantidad de fibra gracias al salvado de avena o trigo, que se consume a lo largo de todo el día.

Aumentar nuestro consumo de fibra, además de ayudarnos a sentirnos saciados antes, evitando así comer más de lo que necesitamos, resulta útil para mejorar el tránsito intestinal, reducir nuestros niveles de colesterol y controlar la glucemia, o sea, los niveles de azúcar en sangre.

Durante las dos semanas que dura esta dieta, se recomienda tomar un vaso de agua con una cucharada de salvado de avena (o de trigo) unos 15 minutos antes de comer, tanto en el desayuno como en la comida y la cena. El salvado es la capa externa del grano y contiene un gran valor nutricional, además de ser un saciante natural.

Esto irá acompañado de una dieta baja en calorías, en la que para desayunar podremos optar por opciones como un café solo con una tostada de pan integral y un huevo cocido, o un yogur con una pieza de fruta. También podremos tomar un zumo de naranja, una pieza de fruta y una tostada, o lo mismo pero con una tortita de harina integral.

Tras el vaso de agua con salvado de avena, para la hora de la comida nos propone consumir carnes bajas en grasa, como pollo o pavo. Así, si un día comemos una porción de pollo con ensalada, aliñada con limón, al día siguiente tomaremos ensalada de verduras.

Las cenas son también muy ligeras, puedes escoger entre un tazón de leche con cereales, un yogur con una pieza de fruta o una mezcla de los tres, pero recuerda siempre tomar el vaso de agua con salvado previamente.

Siguiendo esta dieta es muy sencillo perder peso, pero una vez terminada también es probable volverlo a recuperar. Además, aunque la fibra en nuestra dieta es necesaria, debemos tener cuidado porque un exceso puede producir la disminución de la absorción de nutrientes esenciales, como el calcio y el hierro.

De ahí la necesidad de consultar con un médico o nutricionista antes de comenzar una dieta para perder peso, ellos podrán diseñar un plan personalizado a nuestras necesidades y que resulte realmente efectivo.