¿Qué es la decoración slow? Claves y trucos para tu terraza

La slow deco es mucho más que la forma y el lugar en el que colocamos determinados muebles, es un estilo de vida que aboga por disfrutar el momento, vivir la vida de una forma tranquila, reposada y consciente y que esto quede reflejado en todo lo que nos rodea, en nuestra forma de vestir, de enfrentarnos al mundo y sí, también a la hora de decorar nuestro hogar.

Convierte tu casa en esa burbuja de relajación, en ese lugar que te ayude a dejar los problemas en la puerta y disfrutar de las pequeñas cosas del día a día. Logra esa sensación de calma gracias a los tonos neutros, los materiales naturales, los muebles de madera y las piezas artesanales que definen este estilo de decoración.

Igual que diseñamos y pensamos qué es lo mejor dentro de nuestra casa, el espacio de la terraza también puede reflejar esta filosofía de vida. Para ello debemos apostar por muebles con los que logremos que la naturaleza esté muy presente en nuestro espacio, como seleccionando sillones o sillas de madera, de ratán o fibras naturales.

En este tipo de decoración, estos muebles son la clave, dejando para otras ocasiones los que están hechos de otros materiales como el aluminio o hierro que, aunque son habituales en los espacios al aire libre por ser sencillos de mantener y limpiar, no consiguen transmitir lo que queremos con nuestra decoración.

Los colores que más predominan en las habitaciones slow deco son los blancos y los crudos, logrando de esta forma una mayor claridad en la estancia y consiguiendo que la sensación de desconexión y relax sea mayor. Además de en nuestras paredes, podremos conseguirlo gracias a los textiles con los que vestiremos la terraza.

Por ejemplo, para añadir un poco de confort y así poder disfrutar de largas horas de lectura o meditación, es buena idea colocar sobre los asientos cojines mullidos que hagan que nuestro tiempo en la terraza sea más cómodo. También se suele recurrir a hamacas, pero esto dependerá del espacio disponible, y las mantas, que siempre conviene tener a mano para evitar pasar frío.

Eso sí, si hay un elemento que hace que este estilo sea reconocible en nuestros hogares es el macramé, que ha viajado desde el pasado para convertirse en una de las tendencias del momento y que, en el caso de la slow deco, nos encontraremos en adornos que van directamente sobre las paredes, pero también en cojines, pufs y otros elementos.

Uno de ellos son los botes o faroles que suelen emplearse como sistema de iluminación, algo que podremos hacer sin riesgo gracias a las luces led que sustituyen las tradicionales velas. Así, encontramos estos elementos sobre las mesas, directamente en el suelo o incluso colgadas del techo, acompañando a nuestras macetas.

Los muebles de madera son una forma de conseguir que la naturaleza entre en nuestra casa, pero es mucho más efectivo hacerlo con algunas plantas vivas que nos encarguemos de cuidar y mantener. Este rato de desconexión también resulta muy práctico para relajarnos, dedicándonos a cuidar las plantas lograremos despejar la mente.

Si tu terraza no cuenta con demasiado espacio extra, puedes apostar por los jardines verticales, que se colocan a lo largo (o alto) de una pared y no ocupan el espacio de esparcimiento que tenemos y que podremos convertir en nuestro refugio gracias a todos los detalles que componen la decoración slow y que nos invitan a disfrutar de lo bueno de la vida.