El mito de los 2 litros, ¿cuánta agua hay que beber al día?
Analizamos qué cantidad de agua hay que beber al día y que hay de cierto es los 8 vasos que siempre se recomiendan
El agua es vida y mantenernos hidratadas es fundamental para el buen funcionamiento de nuestro cuerpo. Nos ayuda a conseguir una adecuada temperatura, a eliminar los desechos y toxinas que nuestro cuerpo no necesita, a transportar los nutrientes y mantener lubricadas las articulaciones, entre otras funciones.
Seguro que en más de una ocasión has escuchado que, para conseguir una buena hidratación, es necesario tomar dos litros de agua al día, o lo que es lo mismo, 8 vasos, y puede que esto te haya causado más de un quebradero de cabeza, llegando a sentirte culpable al no alcanzar el cupo o convirtiendo una botella en tu fiel compañera de viaje.
Sin embargo no existe evidencia científica de que esta sea la cantidad correcta que tenemos que consumir. Entonces, ¿cuánta agua debemos tomar? Una vez más conviene señalar que no existe una respuesta universal para esta pregunta, dependerá de cada persona y de sus circunstancias.
Ocho vasos diarios es un objetivo razonable, pero mientras que para algunas personas será insuficiente, para otras resultará excesivo. Para la mayoría de las personas sanas, será suficiente beber cuando sentimos sed.
Casos especiales
Hay algunos factores que pueden influir a la hora de calcular la cantidad de agua que nuestro cuerpo necesita. Uno de ellos es el clima, en ambientes cálidos y húmedos tendemos a sudar más por lo que perderemos más líquidos y tendremos que reponerlos.
También algunos problemas de salud pueden hacer que necesitemos tomar más agua, como cuando tenemos fiebre o enfermedades que nos provocan vómitos o diarreas. Durante los embarazos y la época de lactancia también conviene un mayor consumo de líquidos. Sin duda contar con la opinión de nuestro médico resultará de gran ayuda.
Las personas que hacen deporte de forma habitual necesitan beber agua antes, durante y después del ejercicio, para recuperar los líquidos que se pierden a través de la sudoración, aunque mejor que sea a pequeños sorbos.
Si la actividad física es intensa conviene complementarlo con alguna bebida isotónica, para evitar la pérdida de electrolitos. No conviene abusar de ellas en caso de no realizar este tipo de actividades porque pueden suponer un exceso de azúcares.
Por norma general, se recomienda en adultos sanos, consumir unos 3,7 litros en los hombres y 2,7 litros para las mujeres. La mayor parte de esa cantidad la tomaremos en forma de agua, pero también gracias a otras bebidas como café, leche o té, y de alimentos ricos en agua, como las frutas y verduras.
Como puedes observar, la recomendación de los dos litros diarios no está tan alejada de la realidad, pero conviene tener claro que es eso, una recomendación, no es necesario obsesionarnos con cumplir con esta cantidad exacta, por lo menos en el caso de las personas sin problemas de salud.
No conviene obsesionarnos en exceso, lo mejor es beber cuando tengamos sed, y también cuando sintamos hambre, porque a veces confundimos ambas sensaciones, adaptando las cantidades de agua a los cambios en nuestra vida.
El agua es vida y mantenernos hidratadas es fundamental para el buen funcionamiento de nuestro cuerpo. Nos ayuda a conseguir una adecuada temperatura, a eliminar los desechos y toxinas que nuestro cuerpo no necesita, a transportar los nutrientes y mantener lubricadas las articulaciones, entre otras funciones.