El nuevo escritorio de Ikea es ideal para habitaciones pequeñas y lo tiene todo

No es raro que en los últimos meses nos hayamos visto en la necesidad de crear en nuestra casa un espacio de trabajo, y es que parece que el teletrabajo que llegó obligado ya se queda instalado en parte de muchas empresas. Por pequeño que sea el hueco que tengamos disponible, somos conscientes de que hay algunas cosas de las que no podemos prescindir, y por eso las firmas de decoración intentan diseñar muebles y complementos que nos ayuden a tener todo lo que podamos necesitar.

Es evidente que necesitamos un lugar de trabajo con una buena superficie porque en ella tendremos que contar con espacio para todo lo que queremos tener a mano y que nos haga estas horas de esfuerzo más llevaderas. Por ejemplo, no es raro que necesitemos una lámpara de mesa para iluminar la zona de estudio o trabajo durante las horas en las que la luz natural no es demasiado intensa, como a primera de la mañana o última de la tarde.

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Tampoco es raro que queramos tener cerca muchas de esas cosas que empleamos de forma puntual, como un cuaderno, una grapadora o cualquier otro complemento, pero eso no quiere decir que queramos tenerlo todo en exposición. No todos los elementos de oficina son tan bonitos como los complementos de papelería que solemos escoger para decorar nuestra zona de trabajo, por eso tener un lugar para que queden recogidos al final del día no es una mala solución.

Ikea parece haber leído nuestras mentes y por eso ha puesto en su nuevo escritorio todas esas ideas que, poco a poco, nos hemos ido dando cuenta de que queremos para que nuestro rincón de teletrabajo sea práctico, elegante y no ocupe demasiado espacio. Al fin y al cabo, estamos en nuestra casa, por lo que no queremos renunciar a que esta nueva sección de nuestra decoración siga las líneas que hemos marcado en el resto de la vivienda.

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El nuevo escritorio del modelo Lärande, que podremos conseguir por 120 euros, parece la mezcla perfecta entre diseño y practicidad porque su exterior es agradable, sus acabados están cuidados y se verá bonito en cualquier estancia de la casa en la que hayamos decidido instalar nuestra zona de trabajo.

Esto no es lo único que juega a su favor, pues también tiene un cómodo módulo extraíble para tener todo organizado como deseamos y, sobre todo, para evitar el problema más habitual de este tipo de espacios: el desorden. Todo tendrá su lugar, desde el portátil que empleamos para trabajar, que podremos guardar en uno de ellos al finalizar el día, como todo el resto de elementos que pueden hacernos la jornada laboral más sencilla y llevadera.

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Quienes trabajan con ordenador saben la locura que puede suponer tener todos los cables por cualquier lado. Si además sumamos una lámpara, como hemos señalado antes, tendremos un pequeño caos que podremos solucionar gracias al diseño de esta mesa. Cuenta con un sistema para que estos queden ocultos, ordenados y sin mezclarse, haciendo que sea más sencillo mantener el orden y podamos sentirnos más tranquilos con nuestro escritorio.

No hay duda de que tiene muchos puntos a su favor, pero nada de esto nos hace pensar que sea válido para espacios pequeños porque eso depende de su tamaño. Todas sus virtudes las tiene concentradas en un mueble que solo tiene 48 centímetros de ancho y un metro de largo, por lo que podrás ponerlo en cualquier rincón. No hay duda de que Ikea quiere que trabajemos, o estudiemos, más contentos y organizados.

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