Dieta del hielo: quema calorías extra y pierde peso gracias al frío

Entre las muchas dietas que hay y cuya existencia llega hasta nuestros oídos, hay algunas de ellas que nos llaman la atención por lo que nos proponen. Este es el caso de la dieta del hielo, que basa su éxito en la ingesta de una cantidad de hielo al día hasta alcanzar el peso deseado, una premisa más que sencilla y que nos promete obtener resultados de una forma cómoda y sin demasiados esfuerzos.

Creada por el gastroenterólogo Brian Weiner, la dieta del hielo nos insta a aprovechar las cualidades del hielo en nuestro favor. Al consumir este helado producto estaremos incrementando la tasa metabólica, exigiéndole al cuerpo quemar más calorías para poder lograr recuperar la temperatura corporal que teníamos antes de ingerir el hielo (unos 37 °C). Winer asegura que lograrnos puede ayudarnos a quemar hasta 160 calorías.

Por supuesto esto requiere cumplir con ciertos requisitos básicos, porque su creador asegura que hay una cantidad de hielo diaria que tendremos que tomar: un litro. De esta forma no solo estamos quemando calorías al regular la temperatura corporal, también estaremos aprovechando las propiedades saciantes del agua para adelgazar, ayudándonos a sentir menos apetito y, por tanto, comiendo menos cantidad.

Para que este truco resulte efectivo, Brian Weiner deja claro que hay que acompañarlo de una serie de hábitos saludables, como una dieta equilibrada y una rutina en la que no falte el ejercicio físico de una forma habitual. Esto, ya de por sí, podría ayudarnos a perder peso, sobre todo si para seguir este plan dejamos de lado hábitos menos saludables, como el consumo de productos ultraprocesados o la ingesta de alcohol.

Al contrario de lo que sucede con otras dietas que son restrictivas, eliminando de nuestros menús algunos grupos de alimentos o reduciendo las cantidades de comida que podemos tomar al día, la dieta del hielo solo nos insta a llevar una alimentación equilibrada, hacer ejercicio y masticar un litro de hielo al día, lo que hace que sea una forma sencilla de perder peso. Sin embargo esto no la convierte en la solución definitiva.

Merece la pena destacar que no existe una evidencia científica que respalde los resultados que propone, no especifica cómo debe ser esa dieta saludable por lo que será la intuición propia o los conocimientos previos los que nos indiquen lo que tenemos que comer. Si bien es de sobra conocido que es una buena idea aumentar la ingesta de frutas y verduras, apostar por carbohidratos complejos, proteínas de calidad y fibra.

Ahora que se acerca el calor, la época en la que las temperaturas son más altas y el cuerpo nos pide alimentos frescos, no parece un problema tomar un litro de hielo al día, sin embargo, esto será más incómodo con la llegada del frío, lo que hace que esta dieta no sea sencilla de alargar en el tiempo, se trata más de una solución puntual. El consumo de hielo puede crear sensación de saciedad, e incluso reducir la ansiedad, pero también puede convertirse en una manía y hábito poco saludable, porque masticar grandes cantidades de hielo puede llegar a dañar el esmalte.

En definitiva, no podemos dejar de señalar que, por muchas dietas que nos tienten y nos prometan una forma fácil de perder peso, cuando queremos hacerlo de forma efectiva, lo mejor es ponernos en manos de expertos, profesionales en la materia que nos den las pautas que necesitamos y el apoyo que nos hace falta para alcanzar nuestros objetivos de una forma saludable y eficiente.