Los mejores trucos para renovar tu baño sin tener que hacer obras

Habitualmente asociamos los cambios en los baños con la necesidad de hacer obras, pero nada más lejos de la realidad. Una colcha nueva sobre la cama y el dormitorio se ve diferente, si cambiamos los cojines del sofá el salón lucirá como nuevo, ¿pero qué pasa con nuestros cuartos de baño? ¿Por qué nos cuesta tanto decidirnos a cambiarlos y sentir que estamos de estreno?

Hay muchos trucos que podemos poner en práctica sin necesidad de contratar a alguien que nos ponga la casas patas arriba (o esta habitación en concreto). Con un poco de imaginación, habilidad y paciencia podremos conseguir cambios espectaculares que nos ayudarán a que nuestro baño se vea más moderno, más luminoso y a nuestro gusto.

Hagamos lo que hagamos, el primer paso siempre es ordenar y limpiar. Retira todo lo que tengas en esta habitación, verla completamente vacía puede ayudarte a ser consciente del espacio que tienes disponible y de lo que quieres cambiar. Es el momento también de tirar esas cosas que tendemos a acumular y que no necesitamos. Quédate con lo esencial.

Cambia el color de las paredes de la forma más sencilla del mundo: pintando. Tanto si tu cuarto de baño tiene azulejos como si no, esta será una forma práctica de lograr un cambio radical. Hace mucho tiempo que existen pinturas especiales para todo tipo de superficies, por lo que solo tendrás que asegurarte de que sea válida para tus paredes y escoger el color que más te guste.

Si tu baño no es demasiado grande y no tienes muy claro qué color escoger, elige el blanco. Siempre es una buena idea apostar por los tonos claros, no solo dan una mayor sensación de limpieza y nos permiten seleccionar complementos más divertidos o en colores alegres, también lograremos una estancia más luminosa y que, por tanto, se verá más grande.

La pintura no es la única solución que podemos encontrar para renovar nuestras paredes, escogiendo adhesivos vinílicos podremos lograr el acabado que más nos guste, incluso de baldosa si nuestro baño no la tiene. Esto también puede servirte en el caso de los suelos, escoge un suelo vinílico que te guste y lograrás un cambio espectacular y de una forma muy sencilla.

Una vez que tenemos claros los cambios generales, podemos prestar más atención a los detalles, con los que poco a poco crearemos el espacio con el que tanto tiempo llevamos soñando. Una buena iluminación es clave, por lo que no dudes en cambiar algunas de las lámparas de esta estancia o añadir nuevas.

Lo ideal es conseguir una iluminación general que evite las sombras colocando varios focos en el techo y después añadir algunos puntos de luz específicos, como en la zona del lavamanos o el espejo. Precisamente este elemento también puede ayudarnos a que nuestro cuarto de baño se vea distinto.

Cuanto más grande sea el espejo que escojamos, más amplio se verá nuestro baño, pero también lograras el efecto que buscas si eliges uno completamente diferente, redondo, de fibras naturales, con marco metálico o con molduras trabajadas y que le dé un aspecto más dramático a la estancia.

Comprar algunos muebles decorativos nuevos con los que podamos aumentar el espacio de almacenamiento, colocar algunas plantas que alegren la estancia o cambiar los grifos, una tarea sencilla que podemos hacer nosotras mismas, pueden ayudarnos a conseguir cambios significativos en nuestro baño. Con unas horas de trabajo lucirá mejor que nuevo.