La rutina perfecta para presumir de abdomen plano con solo 4 ejercicios físicos

Uno de los objetivos más habituales cuando empezamos a hacer ejercicio físico, además de sentirnos mejor con nosotras mismas, más fuertes, con menos dolores musculares y más ligeras, es apreciar los cambios en nuestro físico, notando cómo nuestros músculos están más tonificados, luciendo una espalda más fuerte o presumiendo de abdomen plano.

No solo necesitamos hacer ejercicio, hay muchos factores a tener en cuenta, por ejemplo, acompañar el ejercicio físico con una alimentación adecuada hará que el proceso sea más sencillo y los resultados más visibles, por mucho que consigamos tonificar nuestros músculos abdominales, si no intentamos perder grasa, no podremos ver los resultados que queríamos, como el tan deseado six pack.

Conviene tener en cuenta también la importancia de un buen descanso, entrenar está bien, pero no podemos olvidar que nuestro cuerpo necesita recuperarse. Ponernos en forma es una carrera de fondo, por lo que buscar obtener resultados inmediatos evitando descansar, no es una buena idea. Sí lo es ser conscientes de nuestros límites y variar nuestros entrenamientos, como los tiempos o la intensidad.

Así nos lo recomiendan los profesionales de Metropolitan, que además de darnos estas sencillas pautas para planear nuestras jornadas de entrenamiento, también comparten una sencilla rutina que podremos realizar si queremos lucir un vientre más plano y una figura más tonificada. Cuatro ejercicios que podremos realizar por tiempos o por repeticiones, haciendo que sea diferente o aumentando la intensidad cuando queramos continuar evolucionando.

Rutina para un vientre plano

Con cuatro sencillos ejercicios físicos -que repetiremos durante 4 series y de los que haremos entre 15 y 20 repeticiones-, podremos lograr grandes avances, si entrenamos unos cuatro o cinco días por semana.

El primero de estos ejercicios es el que se conoce como Superman y para realizarlo solo necesitamos tumbarnos boca abajo sobre una esterilla y mantener las piernas extendidas y los brazos a ambos lados de la cabeza. Una vez en esa posición, solo tendremos que elevar ligeramente las cuatro extremidades a la vez y, después, regresar a la posición original. Tensa la zona abdominal para mantener el torso estable.

El siguiente será la plancha en tres apoyos, con la que también trabajaremos los glúteos. Partiendo de una posición de plancha tradicional, con las palmas de las manos apoyadas en el suelo, los brazos extendidos y el cuerpo formando una línea recta, elevaremos una de las piernas en las que nos estamos apoyando. Una vez finalizadas las repeticiones, haremos el mismo número con la pierna contraria.

Tumbada boca arriba esta vez, el siguiente ejercicio físico es el puente de glúteos con empuje contralateral. Para realizarlo tendremos que colocarnos en la posición de puente, elevar una de las piernas, manteniéndola flexionada a 90º y sujetar la rodilla con la mano del lado contrario. En esa posición, elevamos la cadera el número de repeticiones marcadas, después cambiamos de pierna y brazo y repetimos el ejercicio.

El último de los ejercicios propuestos para esta rutina es una plancha lateral con rodilla enfrente, es decir, adoptamos la posición de plancha lateral, apoyadas sobre el antebrazo, con el otro brazo extendido hacia el techo, con un pie sobre el otro y formando una línea con el cuerpo, elevando la cadera. Flexionamos y extendemos la pierna que queda en la parte superior, acercado la rodilla al pecho. Finalizadas las repeticiones, cambiamos de lado.

Una vez terminada la primera serie, descansamos unos segundos y la repetimos tres veces más. Una rutina sencilla que puede ayudarnos a sentirnos más fuertes y en forma. Aunque podemos hacerla por nuestra cuenta, no conviene olvidar que, ante cualquier duda, lo mejor es consultar con expertos que puedan guiarte y hacer que tu experiencia sea más efectiva.