Tres planes para comer de lujo esta Navidad
Si te apetece ir a mesa (muy bien) puesta y que todo esté de escándalo, únete a la tendencia que se decanta por hoteles exclusivos
No solo quien venga de fuera y se aloje en los mejores hoteles disfrutará de una Nochebuena, Navidad, Nochevieja o día de Reyes en sus flamantes restaurantes, dirigidos por grandes chefs y con propuestas gastronómicas de locura. Celebrar las fiestas sentadas a la mesa del Four Seasons, el Mandarin Oriental Ritz o The Westin Palace de Madrid está a tiro de piedra para los locales y es una forma de ir más allá de un buen menú. La decoración cuidada al mínimo detalle, la música en vivo y los detalles exclusivos hacen el resto.
Four Seasons, en el corazón de la capital
Para calentar motores y abrir paladar en la cena de Nochebuena, en Four Seasons puedes empezar con su 'propuesta líquida' a través de los cócteles del prestigioso bartender Miguel Pérez en ISA, el nuevo concepto gastro de Madrid. Los aperitivos entrarán solos: ostras con espuma de champagne, corte helado de parmesano y trufa; anguila ahumada acompañada de rábano picante y remolacha, ensaladilla con erizo. Siguen los entrantes de paté en croûte y otro de gamba roja al amontillado con puré de apionabo y polvo de algas.
Ya en faena, el menú sigue con rodaballo acompañado de topinambur y pularda trufada. El postre tiene como protagonistas las castañas en su versión dulce: el Montblanc, con grosella negra y vainilla de Tahití. El precio es de 350 € para los adultos. Por supuesto, Nochevieja también se celebra por todo lo alto. De fondo, música en vivo para dar énfasis a un aperitivo con corte helado de parmesano y trufa; perla de ostra al champagne; paté de ave trufado al vino oloroso; tartar de wagyu y caviar, y un foie al vapor con consomé de pularda, cebolla asada y yema huevo. Los protagonistas son la caldereta de langosta de pescado y el pithivier de pichón con trufa y salsa perigourdine. Y de postre, junto a los imprescindibles turrones, Babá al ron, especialidad francesa y del norte de Nápoles, con trufa negra. El precio es de 1.300 €.
Y ojo, porque si salir de casa da pereza, siempre puedes pasarte al take away. ¿Un menú cinco estrellas, en casa y sin tocar fogones? Lo tienes el 24 y el 31. Quien prefiera las alturas puede subir a la séptima planta y empaparse de las espectaculares vistas de la Gran Vía en Dani Brasserie, el restaurante de Dani García, así como de su especial menú en las fechas señaladas que propone delicias tales como la tarta crujiente de trufa, lata de cangrejo real con caviar y crema agria, besugo y ravioli de rabo de toro (desde 165 €). Por último, está el formato brunch, que el día de Navidad y Reyes se reinventa. Desde los clásicos quesos, patés y embutidos a los mariscos, arroces, carnes, pescados y para quien quiera aligerar, smoothies y zumos (120 € el día 6). También hay plan para quien se decante por la merienda. En El Patio del Four Seasons se puede dar cuenta de un Afternoon Tea a base de pastries, vino y chocolate caliente sin olvidarse del tradicional roscón al gusto por 39 €.
Mandarin Oriental Ritz, experiencia 360º
Pongamos por caso que decidimos cenar en Nochebuena en el flamante Mandarin Oriental Ritz. Los remolones pueden hacer las compras de última hora a escasos metros del hotel en las tiendas más exclusivas antes de degustar la experiencia gastro del galardonado chef Quique Dacosta con un menú de platos con maridaje de vinos y música en vivo. El menú consta de una selección de mariscos, pechuga de perdiz escabechada con ensalada de invierno, boletus edulis ahumados con jugo de ternera y almendras, bogavante azul del Cantábrico guisado a los dos vinos, lubina salvaje en hojaldre (receta tradicional del Ritz), solomillo a la broche y postres.
El precio de la cena es de 480 €. ¿Quizá tú y los tuyos preferís darlo todo en el día de Navidad? Entre otras delicias encontrarás un cono de steak tartar, croquetas de hongos, pistachos verdes y de carrillera con curry rojo, tortilla de patata crujiente con yema líquida, mariscos, mero o pastela crujiente de cochinillo. Vale 280€. La última noche del año tampoco faltan las ostras, percebes, quisquillas y langostinos, el consomé gelée con caviar Osetra, las angulas del Delta del Ebro con emulsión de anguila, la gamba roja de Denia, el rodaballo y la pularda (cuesta 980 €). Y si eres de los que el primer día del año tienen por costumbre comer fuera, también hay propuesta deluxe en Mandarin Oriental Riz. La noche en la que vienen los de Oriente, se cena. Y el día 6 de enero, se come. Entre otras delicias, el cono de steak tartar, croquetas de carrillera con curry rojo, merluza de pincho en costra crujiente (receta clásica del hotel) y, por supuesto, el consabido roscón con salsa de chantilly y nata montada que nunca falta en el hotel (Precio: 310 € adultos).
The Westin Palace, con multiestrella
Uno de los alojamientos con más solera de la capital desde su inauguración en 1912 es el Palace. Catalogado este año como Bien de Interés Cultural del Paisaje de la Luz, patrimonio mundial de la Unesco, además de celebrar Nochebuena, almuerzo de Navidad, de Año Nuevo y día de Reyes, este fin de año dará las campanadas por todo lo alto. El Palace confiará su cena de gala al chef multiestrellado por la Guía Michelin Paco Pérez, uno de los máximos exponente de la gastronomía de vanguardia del siglo XXI.
El chef propone un itinerario gastronómico por la Costa Brava en su propuesta Mar D´Amunt como homenaje a su tierra natal, el Alt Empordá. ¿Qué tal te suena un salpicón a base de bogavante azul aromatizado con fresas y algas de Cantábrico seguido de espardenyas en su pipPil, lubina en su jugo con crema agria y caviar o su receta de carne estrella wagyu con milhojas de trufa y nabo negro de Campmany?
Otro de los platos fuertes es la fiesta posterior bajo la famosa cúpula de cristal favorita de grandes del jazz y de la estrella del Folies Bergère Joséphine Baker en los años 20. Algo así como viajar en el tiempo, disfrutar del delicioso glamour decadente al mismo tiempo que de la mejor gastronomía actual. El precio es de 650 €.
No solo quien venga de fuera y se aloje en los mejores hoteles disfrutará de una Nochebuena, Navidad, Nochevieja o día de Reyes en sus flamantes restaurantes, dirigidos por grandes chefs y con propuestas gastronómicas de locura. Celebrar las fiestas sentadas a la mesa del Four Seasons, el Mandarin Oriental Ritz o The Westin Palace de Madrid está a tiro de piedra para los locales y es una forma de ir más allá de un buen menú. La decoración cuidada al mínimo detalle, la música en vivo y los detalles exclusivos hacen el resto.