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Diez vinos por menos de 20 euros para empezar a celebrar (y no parar hasta enero)
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PREPARANDO EL BOTELLERO

Diez vinos por menos de 20 euros para empezar a celebrar (y no parar hasta enero)

Una relación de etiquetas para sorprender, compartir, disfrutar o regalar. Cualquiera de estos verbos justifica su presencia en las diferentes reuniones que vamos a celebrar

Foto: Celebración entre amigos. (Alasdair Elmes para Unsplash).
Celebración entre amigos. (Alasdair Elmes para Unsplash).

Pensando en el intenso mes que hoy comienza, dadas las señaladas fechas que vamos a celebrar, hemos planificado un nuevo recorrido vinícola a través de esta selección de diez etiquetas. Ninguna supera los 20 euros. Premisa inicial, proceden de muy diferentes territorios y, salvo tal vez un par de botellas, no son vinos habituales ni en editoriales ni en lineales. Por eso, también es una excelente oportunidad para descubrir y seguro sorprender, incluso a quienes se consideran habituales practicantes de 'la cosa vinícola'.

Diciembre invita a compartirlos en los diversos encuentros que ya estamos planificando. No hay reunión que se precie que no celebre con vino y qué mejor ocasión que estas semanas para disfrutarlos con las personas que queremos. Es la motivación de esta propuesta, con etiquetas de diversa tipología, para gustos y bolsillos, que harán buen papel en la mesa. Esta selección se limita a tintos y blancos, pero vendrán otras. En cualquier caso, la recomendación es tomarlas en la mejor compañía.

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Los primeros son dos referencias blancas de bodegas asentadas en la localidad vallisoletana de La Seca, pero vinos que salen al mercado como Vino de la Tierra de Castilla y León. Belondrade Quinta Apolonia 2022 (18,70 €) es el blanco más joven de la bodega familiar Belondrade. Trabajan solo con viñedo propio (unas 40 hectáreas), de manera ecológica, y la suya es una interpretación muy personal de la verdejo, uva protagonista en su viña y en sus vinos. Este blanco, como ellos mismos explican, es fruto de la combinación de parcelas cuyas uvas fermentan en depósitos con un porcentaje de las que lo hacen en barrica. El resultado, frescura y estructura a partes iguales. O lo que es lo mismo, aromas de fruta carnosa y de hueso, hierbas aromáticas y agradables notas cítricas. Fresco en la boca, frutal, cremoso y un final con persistencia.

La bodega vecina es la joven Barco del Corneta, una firma que desde sus inicios ha preferido elaborar al margen de la denominación Rueda, todo en ecológico, y que también ha posicionado sus vinos de verdejo en un lugar destacado. Barco del Corneta 2021 (19 €) es la última añada de su blanco estandarte. Procede de viñas plantadas hace trece años y tiene una crianza en barrica con sus lías de nueve meses, previa fermentación también en barrica. Carnoso, fresco, frutal, mineral, con recuerdos de panadería, agradables herbáceos y buen recorrido en el paso de boca con notas amargas propias de la variedad con que está elaborado.

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La siguiente referencia procede de las toledanas Bodegas Arrayán (el proyecto personal de José María Entrecanales y María Marsans), en el municipio de Santa Cruz del Retamar y bajo la denominación de origen Méntrida. Su artífice es la enóloga Maite Sánchez, y el vino Arroyo de Arrayán blanco 2019 (16 €), compuesto casi a partes iguales de garnacha blana y garnacha gris, y elaborado mediante pisado de racimos enteros en depósitos pequeños. Al final permanece ocho meses en barricas de 300 y 500 litros de capacidad. El resultado, aromas de fruta blanca (manzana), fruta escarchada y recuerdo mineral. Untuoso en la boca, con buena acidez y largo recorrido. El nombre es un homenaje al artista Eduardo Arroyo, gran amigo de la familia, y uno de sus cuadros viste la botella, 'Ramoneur 1976 (Deshollinador)'.

Este malagueño será también un descubrimiento para la gran mayoría pues los vinos de la denominación de origen Sierras de Málaga ni son habituales ni muy conocidos. Por eso optamos por este Payoya Negra 2018 (19,50 €) de Bodega La Melonera, en la Serranía de Ronda. Se trata de un vino tinto compuesto por un 40% de tintilla de Rota, otro 45 % de syrah y un 15 % de romé, que es una variedad autóctona en la zona con la que hacen tintos y blancos. Esta mezcla permanece después un año en fudres de roble francés para su crianza. Es la referencia más emblemática de la casa, una elaboración que refleja el lugar del que procede y que debe su nombre a la cabra payoya, un animal también autóctono andaluz. Un tinto muy particular, con volumen, cargado de notas de frutillos del bosque, especias, toques balsámicos; sabroso, goloso en el paso y con persistencia.

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Dado que tradición obliga y siempre se mira al Rioja como acierto seguro, dos elaboraciones llegadas desde la más famosa denominación. Primero uno de los estrenos más recientes de las centenarias Bodegas Riojanas, Monte Real Cepas Viejas 2021 (15 €). Un monovarietal de uvas de tempranillo procedentes de dos viñas viejas situadas en suelos arcillo-calcáreos, que ha tenido un breve contacto con la barrica, y que se suma a la gama de vinos que la casa viene elaborando a partir de la selección de viñedos. Tiene intensidad aromática (frutitas rojas y negras, especiados, tofe) y resulta carnoso, fresco y frutal en la boca.

De Ollauri procede Beronia Reserva 2017 (14 €), de otra destacada firma riojana, Bodegas Beronia. En su caso de las viñas de más edad de tempranillo que completan con un poquito de graciano y mazuelo, y que ha tenido una crianza de 18 meses en roble americano y francés. Un tinto complejo en nariz, con abundante fruta roja fresca, notas mentoladas, de especias y recuerdos de cacao. Boca voluminosa, con una acidez equilibrada y notas golosas que lo hacen muy gustoso.

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La tanda tinta que queda por delante tiene variada procedencia, pero, en cualquiera de los casos, zonas de referencia y cuatro vinos de marcada identidad. Porque es sobre todo eso, singularidad a partir del territorio, lo que caracteriza las elaboraciones llegadas del Priorat como este Ànima del Priorat 2021 (15,50 €) novedad de Casa Gran del Siurana. Un coupage de cuatro variedades en las que se imponen las autóctonas cariñena y garnacha (representan el 60%), pero a las que han sumado syrah (19%) y cabernet sauvignon (12%). No tiene contacto alguno con la barrica. Entre sus particularidades, una parte del vino fermenta en cemento además de que también hay una parte de racimos enteros (es decir, con raspón). Por todo, un tinto en el que se impone la fruta roja fresca, las notas balsámicas, junto a los minerales que identifican al Priorat. Pero ante todo, un vino muy vivo, jugoso, con frescura y vida por delante.

Luego, de los muchos vecinos que tiene la Ribera del Duero, y que podrían sumarse a esta selección, para esta ocasión hacemos la parada en la también vallisoletana Legaris, en Curiel de Duero, y donde Jorge Bombín, enólogo y director técnico, elabora Páramos de Legaris 2018 (19,90 €). Un nombre elegido por la procedencia de las uvas, todo tinto fino (tempranillo), una selección de páramos de la Ribera de los pueblos de Moradillo de Roa, Peñafiel y Pesquera del Duero. Elegidos los tres por la altitud de los viñedos, rozando y superando con creces los 900 metros. Tras una media de nueve meses entre barricas americanas y francesas, presentan un vino equilibrado, elegante, con intensos aromas de fruta madura junto a notas tostadas y de especias, que en la boca resulta sabroso, fresco y con mucho recorrido.

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La última pareja son dos vinos mediterráneos, uno de la denominación Utiel-Requena y su acompañante de Jumilla. Finca San Blas Bobal 2018 (16 €) es una de las referencias que elabora la bodega del mismo nombre, Finca San Blas, localizada en el municipio valenciano de Requena. De uvas de bobal, la variedad autóctona de esta zona, hizo la fermentación maloláctica en fudres, donde después ha permanecido 14 meses. El resultado, un vino intenso marcado por la fruta roja madura, notas mentoladas, ahumados, especias, café con leche, a lo que sigue una boca jugosa, amplia, cremosa, con fresca acidez y largo en el postgusto.

Y para terminar un monovarietal de syrah de las jumillanas Bodegas Carchelo, Altico 2018 (11,95 €), con una crianza de un año en barrica francesa. Es una de las etiquetas que conforman su colección Viñedos Singulares, a través de la que pretenden reflejar la riqueza de la tierra en la que se asientan las viñas. Una elaboración en la que destacan las notas de frutas silvestres, las flores, junto a aromas tostados y de especias. Amplio, con frescura y fino en el paso.

Diez referencias a modo de excelentes alternativas para acompañar los momentos especiales que en estas semanas vamos a compartir, que atienden a gustos variados y que no suponen un asalto a nuestros bolsillos.

Pensando en el intenso mes que hoy comienza, dadas las señaladas fechas que vamos a celebrar, hemos planificado un nuevo recorrido vinícola a través de esta selección de diez etiquetas. Ninguna supera los 20 euros. Premisa inicial, proceden de muy diferentes territorios y, salvo tal vez un par de botellas, no son vinos habituales ni en editoriales ni en lineales. Por eso, también es una excelente oportunidad para descubrir y seguro sorprender, incluso a quienes se consideran habituales practicantes de 'la cosa vinícola'.

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