La primera parada de este recorrido no podía ser otra que el Rockefeller Center de Nueva York, el clásico por antonomasia para todos los amantes de las Navidades. Visita imprescindible al menos una vez en la vida, cada Navidad colocan un abeto de 24 metros de altura decorado con 8.000 metros de alambre y unas 45.000 luces. Como lo lees.
Estará disponible para el público desde el 29 de noviembre hasta el 13 de enero y, aunque sea complicado verlo por la altura, el abeto está coronado por una estrella realizada con cristales de Swarovski diseñada en 2018 por el arquitecto Daniel Libeskind, pesa 408 kilos, mide casi 3 metros, tiene 70 puntas triangulares y 3 millones de cristales.