Hablamos con Craig Mazin, el hombre tras 'The Last of Us': "Espero que la era dorada de las series dure siempre"

Cualquiera diría que Craig Mazin es uno de los nombres más importantes del negocio de la televisión en los últimos años. Los datos para afirmar tal cosa están ahí: el showrunner de ‘The Last of Us’, que vuelve a Max y a nuestras vidas el 14 de abril, fecha en la que nos reencontraremos con Joel y Ellie, también está detrás, por ejemplo, de ‘Chernobyl’. Y cualquier amante del audiovisual sabe que, como ‘The Last of Us’, esa es una de las mejores series del siglo XXI.

El hombre sonriente y afable que nos encontramos este lunes en el Hotel Santo Mauro de Madrid parece más el chiquillo que hizo el guion de o alguna de aquellas secuelas gansas de ‘Scary Movie’ de los 2000. Agradece cada elogio que le hacemos y es consciente del desafío que supone volver a unos personajes que aman tanto los fans del videojuego de Neil Druckmann como los de la propia serie. Unos y otros son ya la misma cosa.

Este abril volvemos a ese futuro postapocalíptico lleno de personas sedientas de sangre y a una especie de Odisea en la que Itaca es un lugar imposible y un hombre de pasado traumático y una joven con una solución valiosísima conforman un dúo muy especial; un padre y una hija postizos que tratan de sobrevivir a toda costa.

En estaa entrevista, Mazin nos habla de ellos, de la era dorada de las series de televisión, del Hollywood de los 70 o de esa ciencia ficción siempre dispuesta a darnos claves sobre nuestras propias vidas.

Pregunta. ¿Cuál ha sido el mayor desafío de esta temporada?

Respuesta. El mayor desafío ha sido el tamaño. Obviamente, tenemos a Pedro Pascal y a Bella Ramsey. Ellos ya conocen a sus personajes y nosotros conocemos a sus personajes. Yo simplemente tuve suerte la primera vez. El proceso de adaptación de ese primer juego fue más difícil. La segunda vez que lo haces, creo que todo debería ser un poco más fácil. Pero el tamaño lo complica... Por un lado, estamos ante un espectáculo mucho más grande. Por otro lado, tuvimos que estar afuera, con frío, bajo la lluvia, de noche y de día. 75 días de rodaje y luego la edición y la mezcla de sonido, y los efectos visuales que son enormes... Estoy un poco cansado, pero también emocionado por ver lo que la gente va a decir de esta temporada.

-¿Habrá un capítulo tan especial como ‘Long, long time’, que provocó un huracán en redes con su historia de amor gay?

Cuando hicimos aquello, nos dijimos a nosotros mismos: 'Mejor no intentarlo de nuevo'. No estoy seguro de que podamos repetir eso, pero lo que realmente me encantó de ese episodio fue centrarnos en la historia de una relación de dos personas, para ralentizar las cosas, para hacerlas más simples. Especialmente en esta temporada, que es tan grande, creo que sí hay un episodio que funciona de esa manera especial.

Tengo que ser honesto contigo. Después de escribir un libro, pensé: 'Nunca voy a escribir algo tan bueno otra vez'. Y luego escribí aquel episodio y pensé de nuevo: 'Nunca voy a escribir algo tan bueno otra vez'. Creo que hemos hecho algo diferente en esta temporada, pero sí, hay un episodio que funciona de la manera en que funcionó aquel otro.

-Desde ‘Aliens’ a ‘Civil War’ o la propia ‘The last of us’, parece que la maternidad y la paternidad están bastante unidas a la ciencia ficción. ¿Qué piensa acerca de eso?

La ciencia ficción funciona igual que la no ciencia ficción. En ambos casos se hace lo mismo. Siempre estamos tratando de entendernos a nosotros mismos ahora, aquí, en este mundo. A veces es más fácil decir: 'Vamos a dejar este mundo e ir al espacio, a un planeta diferente, a un tiempo diferente, para entender nuestro presente un poco mejor'. Y la paternidad es una de las experiencias más profundas que podemos tener.

Hay algo fascinante en saber lo que significa ser un niño, lo que significa tener un padre. Incluso si no está ya, y alguien tiene que cuidarnos. A veces de manera deficiente. Sabemos lo que significa amar a alguien de esa manera. Y también sabemos lo que es tener esta otra experiencia en la que tienes a tu propio hijo y temes por él. Y ves cómo crece y quiere dejarte. Esta clase de bella y dura experiencia necesita de un comportamiento maravilloso y terrible, y creo que eso es aún más importante en la ciencia ficción, para asegurarnos de que nuestra historia de ese género conecte y le importe a todos aquellos que la vean.

-Han pasado más de 25 años desde ‘Los Soprano’. ¿Por qué cree que esta edad de oro televisiva está durando tanto?

En los años 70, el cine en Estados Unidos se volvió especial. Y creo que se volvió especial porque los estudios que estaban haciendo películas de repente no sabían qué estaban haciendo (risas). En los años previos hubo bastante estabilidad en el negocio. Y luego todo empezó a desmoronarse y los artistas empezaron a hacer cosas. Creo que en algún momento, alrededor de la era de 'The Sopranos', HBO en particular se apartó de la forma de hacer televisión que hacían los demás. Y hasta el día de hoy creo que son especiales en ese sentido. Siempre están tratando de hacer algo lo suficientemente bueno.

- ¿Qué cree que sucedió entonces?

En aquel momento, sucedieron dos cosas interesantes. Una: Estados Unidos comenzó a adoptar un sistema más común, como en el Reino Unido, que consiste en hacer menos episodios pero tratando de hacerlos mejores. Y la segunda fue el streaming. De repente, nadie sabía lo que iba a pasar y, dentro de todo ese cúmulo de circunstancias, ocurrieron cosas bastante asombrosas con las series.

No sé cuánto durará esto. Espero que dure para siempre. Creo que la televisión que ha tenido lugar en los últimos veinte años es una de las mejores en cuanto a lo artístico que hemos visto. No solo la de Estados Unidos, sino también la de Europa y Asia. Asia, en particular, hace cosas increíbles. Este es un momento muy emocionante para ser fan de las películas y de la televisión.

- Parece que es más fácil para las plataformas dedicar dinero a productos adultos que en el mundo del cine.

A veces me siento casi como los pintores deben haberse sentido cuando la iglesia les dio más dinero para hacer esas hermosas pinturas. Es increíble que hayan dejado a los estudios hacer cosas increíbles. Todo eso da más razones para que no la caguemos.

-¿Ha sentido la presión de los fans de los videojuegos en esta temporada?

Soy fan de los videojuegos. Así que siento la misma presión. Recuerdo cuando estábamos trabajando en la primera temporada. Cuando leía a la gente expresar preocupación o duda, pensaba: ‘Sí, si estuviera en sus zapatos, también estaría expresando esas mismas preocupaciones por la adaptación’. Lo mismo ocurre con esta temporada. Creo que hay muchas personas que tienen esas dudas porque aman la serie. Si no la amaran, no les importaría. Yo soy creador y fan al mismo tiempo.Y esas dudas me parecen positivas...

-¿Se puede contentar a todos?

No puedes hacer feliz a todo el mundo. Pero siempre siento que las personas a las que debemos cuidar son las que lo aman. Eso es lo más importante. No tiene mucho sentido tratar de convencer a las personas que odian algo de que deberían amarlo. No me gustan los memes y a veces la gente intenta convencerme de que deberían gustarme. No me gustan y nunca me van a gustar. La gente que ama los memes no debería intentar hacerme feliz. Soy una causa perdida. Nos preocupamos principalmente por las personas a las que sí les gustamos.