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El clásico de Hollywood que arrasa en China está de aniversario y puedes verlo en Filmin
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85 años de 'EL PUENTE DE WATERLOO'

El clásico de Hollywood que arrasa en China está de aniversario y puedes verlo en Filmin

Protagonizada por Vivien Leigh y Robert Taylor, 'El puente de Waterloo' superó las veladas referencias sobre la prostitución y fue un gran éxito que ha marcado a varias generaciones de ciudadanos chinos

Foto: Cartel promocional de 'El puente de Waterloo'. (CP)
Cartel promocional de 'El puente de Waterloo'. (CP)

El dato no deja de ser llamativo: hasta hace pocos años, los estudiantes chinos que querían aprender inglés utilizaban audioguías con diálogos de una misma película. Esa cinta no es ningún 'Harry Potter', ni un 'Star Wars' ni tampoco la última superproducción de Marvel. Se trata de 'El puente de Waterloo', un viejo drama romántico de cuyo estreno se acaban de cumplir 85 años, se puede ver en Filmin y que ni siquiera es excesivamente recordado por el propio Hollywood que lo parió, allá por 1940.

La historia de amor entre una bailarina obligada a dedicarse a la prostitución por culpa de la guerra y un soldado de buena familia conmovió tanto al público chino que incluso llegó a convertirse en una ópera en Shaoxing e hizo de la legendaria 'Auld Lang Syne', canción popular escocesa que acompaña a los norteamericanos en todas las fiestas de Nochevieja, un himno en el país asiático.

Pero, ¿por qué un romance dirigido por Mervyn LeRoy que protagonizaron Vivien Leigh y Robert Taylor hace casi un siglo ha sido tan célebre en un país como China? Podríamos decir que también ellos sufrieron los efectos crueles de la guerra. O que fueron tan fans de 'Lo que el viento se llevó' y de Leigh como el resto del planeta.

Pero para entenderlo de manera completa, tendríamos que empezar por el origen de una historia que se basaba en una obra de Robert Emmet Sherwood. La pieza teatral ya había sido llevada al cine en 1931.

Fue entonces cuando James Whale (el hombre tras 'Frankenstein' (1931) dirigió el primer 'puente de Waterloo' con Mae Clarke y Douglass Montgomery como estrellas. En esos años, previos al Código Hays, el oficio de 'mala mujer' del personaje principal se evidenció sin ningún problema de censura. Así de atrevido era aquel Hollywood de principios de los 30.

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placeholder Leigh entre bailarinas (FOTO 2) y al lado de su amado Robert Taylor en 'El puente de Waterloo'. (Warner)
Leigh entre bailarinas (FOTO 2) y al lado de su amado Robert Taylor en 'El puente de Waterloo'. (Warner)

No así en la segunda y más popular versión, la de 1940, que además en España sufrió cortes de montaje tan atroces que hicieron incomprensible la historia para el público de la época. Los espectadores más avezados no sabían muy bien qué le ocurría al personaje de la pobre Vivien Leigh y, almas cándidas producto de una época concreta, no podían imaginar que se dedicaba a la profesión más antigua del mundo.

Porque, si por algo es recordada 'El puente de Waterloo' hoy día es por ser la primera cinta de la legendaria Escarlata O'Hara como protagonista tras el fenómeno 'Lo que el viento se llevó'.

De Tara a un puente de Londres

Por una serie de acuerdos entre el productor de aquel megaéxito, el obsesivo David O. Selznick, y la Metro-Goldwyn-Mayer, Leigh tenía la obligación de protagonizar una película para el estudio del león rugiente. Selznick exigió al estudio que sacasen a su estrella lo más guapa posible y, a día de hoy, los primeros planos de la actriz en 'El puente de Waterloo' constituyen algunos de los más bellos de toda la historia del cine.

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placeholder Leigh, un sueño para los primeros planos en 'El puente de Waterloo'. (Warner)
Leigh, un sueño para los primeros planos en 'El puente de Waterloo'. (Warner)

Ella, que ese mismo año se casó con el que había sido su amante, Laurence Olivier, quería que su chico fuese el protagonista. Pero Louis B.Mayer tenía una idea diferente y optó por el Robert Taylor de perfil perfecto que tenía millones de fans en Estados Unidos.

El galán de la Metro, que lució aquí bigotito por primera vez, siempre dijo que esta era la película favorita de todas cuantas había rodado. Y ojo, que en su filmografía hay incunables como 'Margarita Gautier' (1936) o 'Quo Vadis' (1951).

Lo mismo ocurrió con la propia Leigh, según dijo Mervyn LeRoy (que en su haber tiene haber inventado el cine de gangsters con 'Hampa dorada' o dirigir la versión más popular de 'Mujercitas'): "Muchos creen que es mi mejor film. Mi buen amigo, Jack Benny, dice que la considera su favorita entre todas las mías. Vivien Leigh, quien la coprotagonizó con Robert Taylor, siempre dijo que era lo mejor que había hecho. Considerando que acababa de rodar 'Lo que el viento se llevó' (1939) cuando vino a verme, lo considero un gran elogio".

placeholder Vivien Leigh como Myra, el papel que hizo tras ser Escarlata O'Hara. (CP)
Vivien Leigh como Myra, el papel que hizo tras ser Escarlata O'Hara. (CP)

Nominada al Oscar (acababa de ganarlo por 'Lo que el viento se llevó') por su interpretación, Leigh y su belleza maldita son uno de los elementos poéticos de una película rodada a la antigua usanza. El beso bajo la lluvia entre ella y Taylor o la expresionista iluminación de la escalera cuando la joven la sube tras despedirse de su amado en la calle forman parte de un cine que ya no se hace. Poesía visual en grado máximo.

Como en toda gran cinta del Hollywood clásico, hay docenas de momentos culminantes; secuencias diseñadas para impactar a un público que no estaba acostumbrado a la vulgarización de la imagen de nuestros días. De la aparición de Myra (así se llama Leigh en la cinta) representando 'El lago de los cisnes' al baile de la pareja con luz de velas (momento en el que suena de fondo la mencionada 'Auld Lang Syne') o el terrible final de la pobre danzarina (conviene no hacer SPOILER), todo en 'El puente de Waterloo' rezuma buen gusto pese a que hoy nos pueda parecer una historia de amor común.

placeholder Leigh y Taylor, una pareja de leyenda. (CP)
Leigh y Taylor, una pareja de leyenda. (CP)

Hacia el final de su vida, Robert Taylor, que no solía acumular copias de sus películas, solicitó una de 'El puente de Waterloo'. Entre la nostalgia y el delirio, el que fuese el guapo oficial de MGM la vio varias veces antes de irse de este mundo. Lo mismo que gran parte de la población china para la que el amor maldito entre Roy y Myra fue, durante varias generaciones, el más fascinante que les regaló la gran pantalla. Como cantó Massiel, el amor es un rayo de luz indirecta. En China o en cualquier parte del mundo.

El dato no deja de ser llamativo: hasta hace pocos años, los estudiantes chinos que querían aprender inglés utilizaban audioguías con diálogos de una misma película. Esa cinta no es ningún 'Harry Potter', ni un 'Star Wars' ni tampoco la última superproducción de Marvel. Se trata de 'El puente de Waterloo', un viejo drama romántico de cuyo estreno se acaban de cumplir 85 años, se puede ver en Filmin y que ni siquiera es excesivamente recordado por el propio Hollywood que lo parió, allá por 1940.

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