Cuando se habla de destinos navideños en España, Vigo y Madrid suelen llevarse todo el protagonismo. Sin embargo, hay otros rincones del país que, sin contar con millones de bombillas o macroencendidos televisados, consiguen transmitir la magia más pura de la Navidad. Calles adoquinadas, mercados artesanales, plazas iluminadas y el olor a castañas asadas crean una atmósfera tan acogedora como inolvidable. Si este año buscas escapar del bullicio y descubrir nuevas luces —literal y emocionalmente—, estos cinco destinos te sorprenderán.
1. Málaga: la joya luminosa del sur
La capital de la Costa del Sol se ha consolidado como una de las ciudades más deslumbrantes durante la Navidad. Cada año, la calle Larios se convierte en un auténtico espectáculo de luz y música, con instalaciones que rivalizan con las de las grandes capitales europeas. Pero más allá del centro, los barrios, los mercadillos del Muelle Uno y la noria del puerto también se visten de gala. Pasear con una copa de vino dulce malagueño mientras suenan villancicos en directo es una experiencia que encapsula a la perfección la calidez del sur en invierno.
Encendido de las luces de Navidad 2024 en el centro de la ciudad, a 29 de noviembre de 2024, en Málaga, Andalucía (Europa Press).
2. Granada: luces entre historia y Sierra Nevada
Pocas ciudades ofrecen un contraste tan mágico como Granada en Navidad. Las luces del casco histórico iluminan la Alhambra y el Albaicín, creando postales de cuento. La Plaza Bib-Rambla se convierte en el corazón de la celebración, con su mercado artesanal repleto de dulces típicos y decoraciones hechas a mano. Además, a solo media hora en coche, Sierra Nevada ofrece la posibilidad de combinar la magia navideña con la nieve: esquiar por la mañana y pasear bajo las luces por la tarde.
3. Barcelona: modernismo y espíritu festivo
En Navidad, la Ciudad Condal despliega una elegancia que combina tradición y vanguardia. Desde la avenida del Paseo de Gracia —con las fachadas modernistas de Gaudí como telón de fondo— hasta el mercado de Santa Llúcia frente a la catedral, todo invita a dejarse llevar por el ambiente. Este año, las proyecciones en la fachada del Ayuntamiento y las luces de la Sagrada Familia son dos imprescindibles que no puedes perderte. Además, la ciudad ofrece una versión más sostenible de las fiestas, con decoraciones de bajo consumo y materiales reciclados.
Aspecto del Portal de Ángel durante el encendido de las luces de Navidad 2024 en Barcelona. (EFE)
4. Sevilla: una Navidad con duende
En Sevilla, la Navidad se vive con el mismo arte y pasión que caracteriza al resto del año. Las luces de la Avenida de la Constitución y la Plaza de San Francisco convierten el centro en un escenario vibrante, mientras los coros de campanilleros llenan las calles con música tradicional. Los belenes —auténtica institución en la ciudad— atraen a miles de visitantes, especialmente el monumental que se instala en el Ayuntamiento. Y cuando cae la noche, nada mejor que disfrutar de un chocolate con churros junto al Guadalquivir para poner el broche final al paseo.
5. San Sebastián: elegancia junto al mar
La capital guipuzcoana combina la sofisticación de su arquitectura con una decoración navideña sobria pero espectacular. El mercado de Navidad del paseo del Urumea, con sus casetas de madera, recuerda a los clásicos mercados europeos, pero con un toque vasco inconfundible. Las luces reflejadas sobre el mar y el puente de María Cristina iluminado ofrecen una estampa única. Además, durante diciembre y enero, la ciudad acoge conciertos, exposiciones y una variada oferta gastronómica, ideal para quienes buscan unas fiestas más tranquilas y con encanto.
Cuando se habla de destinos navideños en España, Vigo y Madrid suelen llevarse todo el protagonismo. Sin embargo, hay otros rincones del país que, sin contar con millones de bombillas o macroencendidos televisados, consiguen transmitir la magia más pura de la Navidad. Calles adoquinadas, mercados artesanales, plazas iluminadas y el olor a castañas asadas crean una atmósfera tan acogedora como inolvidable. Si este año buscas escapar del bullicio y descubrir nuevas luces —literal y emocionalmente—, estos cinco destinos te sorprenderán.