Los Javis deberían estar temblando: la maldición de los Goya planea sobre ellos

Los Premios Goya tienen su lado oscuro. Todo el mundo lo sabe. Es un secreto a voces: la maldición de los Goya es una realidad que se ha llevado por delante la carrera de un buen puñado de prometedores nombres que parecía que estaban llamados a la gloria del olimpo cinematográfico después de llevarse el galardón y que, sin embargo, cayeron en el olvido tras llevarse la estatuilla a casa. Una condena que ha estado muy vinculada a la categoría 'revelación'. Los Javis, nominados como mejor dirección novel, podrían ser los próximos en sufrir este 'mal fario'.

Claro que los chicos que forman la pareja del año no son los únicos señalados: Carla Simón como directora de 'Verano 1993', Eneko Sagardoy​, el niño gigante de 'Handia', o Sandra Escacena, la chica poseída de 'Verónica', podrían pasar a engrosar la lista de malditos de los Goya si finalmente se hacen con la estatuilla. Si no nos creen, no tienen más que googlear el nombre de la protagonista de 'Juana la Loca' (que le valió un 'cabezón') y verán que una de las primeras entradas que aparecen en el buscador es “¿Qué fue de Pilar López de Ayala?”.

Los olvidados

Pilar López de Ayala y Achero Mañas son dos de los nombres que más veces se sacan a colación cuando se habla de esa condena al olvido que trae consigo la consecución de un premio de la academia. Ella lo ganó por la película que daba vida a la mujer de Felipe el Hermoso y él por la aplaudida 'El bola'. Después de hacerse con la estatuilla, Achero firmó 'Noviembre', que también le supuso cierto aplauso, y después la nada hasta 2010 con una película ('Todo lo que tú quieras') que pasó sin pena ni gloria. Coincidiendo con el estreno, Achero se sinceraba: “Siempre he pensado que al Bola le había jodido la vida”, explicaba el director en referencia a lo mucho que le cambió la vida a Juan José Ballesta, el protagonista y Goya al mejor actor revelación cuya trayectoria también ha sufrido altibajos y que llegó a dedicarse a la albañilería por culpa de la presión.

¿Alguien se acuerda de Julio Wallovits y Roger Gual? Lograron el premio a mejor director novel por 'Smoking Room' en 2003 y se convirtieron en los abanderados de una nueva generación de directores. La crítica se deshizo en elogios y vaticinó una brillante carrera que, sin embargo, se detuvo casi antes de arrancar.

En algunos casos, la maldición se cebó con jóvenes promesas a las que el galardón les pilló demasiado jóvenes, como Andoni Erburu​, que ganó con nueve años el Goya a mejor actor revelación por 'Secretos del corazón': “A mí me vino grande y me agobié un poco con la edad que tenía”. Ahora es técnico comercial en una empresa agrícola. También se le hizo un poco de bola a Jesús Carroza, que logró el mismo galardón con 18 años por '7 vírgenes' y que se apuntó a un curso de electricista a los meses de rodar la película.

Como la maldición no hace distinción de géneros, las féminas también la han sufrido: casos como Micaela Nevárez, Goya a la mejor actriz revelación 2006 por 'Princesas' y a la que no volvimos a ver nunca más; Ruth Gabriel, que ganó el cabezón en 1995 por 'Días contados' y cuya trayectoria fue muy errática; o Cristina Marcos (Goya por 'Todos los hombres sois iguales'), que afirmó: “He estado dos años y medio en paro y ha sido duro”. Incluso actrices como Candela Peña, que cuenta con tres galardones, ha denunciado siempre que ha podido su situación personal y ha pedido trabajo. “Desde aquí os pido trabajo. Tengo un niño que alimentar”.

¿La maldición es un bulo?

Inma Cuesta no debe de ser supersticiosa o tiene las cosas muy claras porque ha afirmado, cuando fue preguntada por esta 'leyenda urbana': "Dicen que eso es con la 'revelación' y yo hace ya tiempo que me revelé. Yo a 'revelación' nunca he estado nominada, así que… En esa maldición no creo y si viene, la llevaremos como podamos. Pero fíjate Natalia de Molina, que ganó hace 2 años y no ha parado de trabajar y está nominada. O sea que esa maldición no existe. Se ha cumplido en muy pocas ocasiones”, aseguraba la actriz. Puede ser, Inma, tal vez deberíamos preguntarle a Marieta Orozco, Goya a la mejor actriz revelación por 'Barrio' y que dijo: “Este es un premio muy inmediato, con mucha parafernalia, pero que con la perspectiva de los años que han pasado, no me ha aportado mucho más”.

Tal vez Inma tenga razón, tal vez sea que no hay maldición y solo se trate de 'una serie de catastróficas desdichas'. Veremos lo que ocurre este año, aunque mucho nos tememos que más de uno y de una estén deseando que no le den el premio para no amargarles la carrera.