Última hora del estado de salud de Teresa Campos

Teresa Campos ingresaba el sábado en el hospital La Luz por dolores abdominales. Durante el fin de semana le practicaron una serie de pruebas de urgencia para descartar cualquier complicación importante. Este lunes continuará en observación y con análisis más intensos, ya que los domingos no suelen practicarse salvo que sea un enfermo grave. La situación de Teresa Campos no entraba en ese protocolo y lo que sí recibió fue la visita de su médico más para tranquilizarla que como necesidad urgente.

El fin de semana recibió las visitas de su novio Bigote Arrocet y nietos. El sábado pasó buena noche y se quedó a dormir Terelu con ella, y en cambio el domingo con su otra hija Carmen Borrego estuvo más intranquila. María Teresa no quiere ya más complicaciones tras el ictus que sufrió hace ahora un año: "Ya no quiero correr riesgos innecesarios. Me encontraba mal y me vine para el hospital". Desde su entorno confirmaban que ha sido más precaución que preocupación.

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J.R

Vanitatis contactó con la periodista que aseguró encontrarse mucho mejor: "Quiero dar la gracias por el interés y el cariño que me están demostrando. Y no solo los amigos, sino personas con las que tengo menos trato". Y con sentido del humor aseguraba que su problema era el aburrimiento.

"A mi madre como a cualquiera no le gustan los hospitales y en cuanto se encuentra bien quiere irse", explicaba la menor de las Campos, quien puntualizaba que el reciente viaje a Chile y Argentina para grabar el reality no tiene nada que ver con el malestar actual. "Lo hemos pasado muy bien y mi madre ha descansado lo suficiente". Teresa Campos podría recibir el alta el miércoles, una vez que esté listo el resultado de todas las analíticas.