El 'annus horribilis' de Irene Montero, del parto prematuro a la muerte de su padre
La portavoz de Podemos ha vivido una gestación convulsa, marcada por la polémica suscitada por la compra de su chalé en Galapagar y por el reciente fallecimiento de su padre
Este 2018 lo tenía todo para ser un año perfecto. La pareja deseada, un embarazo de gemelos, una mudanza... Pero poco a poco se ha ido torciendo y ahora Irene Montero vive uno de sus peores momentos. En su particular 'annus horribilis', el nacimiento prematuro de sus dos bebés ha sido el culmen.
Con la ciencia y la tecnología actual no suele haber problema en este tipo de nacimientos. Bebés de tan solo 1,2 kilos superan el bache con la ayuda de los profesionales sanitarios. Pero el dolor y la incertidumbre de los padres es profunda.
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No ha sido este el único susto que ha vivido Montero durante su embarazo. Su padre moría hace menos de un mes también de manera prematura, después de luchar durante un año contra una enfermedad. A su muerte, Montero escribía en Instagram un poema de Mario Benedetti para su progenitor:
"Ahora recorro tramo a tramo / nuestros muchos acuerdos / y también nuestros pocos desacuerdos / y siento que nos quedan diálogos inconclusos / recíprocas preguntas nunca dichas / malentendidos y bienentendidos / que no podremos barajar de nuevo / Pero todo vuelve a adquirir su sentido / si recuerdo tus ojos de muchacho / que eran casi un abrazo casi un dogma. / El hecho es que llegaste / temprano al buen humor / al amor cantando / al amor decantado / al ron fraterno / a las revoluciones / pero sobre todo llegaste temprano / demasiado temprano / a una muerte que no era la tuya / y que a esta altura no sabrá que hacer / con / tanta / vida.”
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Fue la primera polémica que tuvo que capear durante su embarazo, una gestación compleja que ha culminado este martes con el nacimiento de los dos niños. Les esperan semanas duras pero con la tranquilidad de tener a sus hijos con ellos.
Este 2018 lo tenía todo para ser un año perfecto. La pareja deseada, un embarazo de gemelos, una mudanza... Pero poco a poco se ha ido torciendo y ahora Irene Montero vive uno de sus peores momentos. En su particular 'annus horribilis', el nacimiento prematuro de sus dos bebés ha sido el culmen.