Cher y su madre, un milagro de la naturaleza (o del cirujano): hablan los expertos

Cher y su madre han conseguido que 'El retrato de Dorian Gray' haya pasado de las letras de Oscar Wilde a la realidad 'made in Hollywood'. Madre e hija, de 94 y 74 años respectivamente, posan sonrientes en lo que parece ser un desafío y una burla a las leyes de la física y las manecillas del reloj. Algunos internautas han tirado de Twitter para pedir un Premio Nobel para el cirujano de ambas.

Georgia Holt, que es el nombre de la mamá de la cantante, fue también en sus años mozos cantante, actriz y modelo, y se ve, a juzgar por las fotografías, que portadora de un material genético inmejorable. Nacida un 9 de junio de 1926, no solo ha logrado llegar a los 94 después de haber sobrevivido a una guerra mundial, la Gran Depresión y 17 colegios (como hija de padres separados su infancia y adolescencia fue muy movida), sino que lo ha hecho con un aspecto que levanta pasiones en las redes. Y lo mismo ocurre con su hija, que acaba de cumplir 74 (lo hizo el 20 de mayo) y podría llevarse el bonus de los 500 euros si participara como desconocido en 'El concurso del año' de Dani Martínez. Suponemos que la mezcla de sangre inglesa, alemana, irlandesa, francesa y holandesa que corre por sus venas ha tenido algo que ver, pero mucho nos tememos que algún truquito con la cirugía tiene que andar por medio. Así que hemos preguntado a expertos en la materia.

Estética, plástica, nutrición

Según Amaya Jiménez, de AG Biomedic, la artista "es una mujer que lleva cuidándose más de 50 años y no es producto de la casualidad que esté tan estupenda, sino de un completo plan de tratamiento que incluye cirugia plástica, medicina estética, plan de nutrición, antienvejecimiento, entrenamiento físico y otros".

"A nivel psíquico, por ejemplo, sigue varias terapias tipo 'coach emocional' desde hace años". Otra de las claves de la actriz y cantante a la hora de mantenerse joven ha sido, sin duda, ser consciente de ello desde que era aquella jovencita que cantaba al lado de Sony Bono. Dicho en con otras palabras: a Cher no le ha pillado el toro. El doctor Simon Dray piensa que "llegará un momento en el que ya no pueda hacerse nada porque el envejecimiento tiene un límite".

Su cara es "un estilo de cara. Está estupenda pero se nota demasiado que no es algo natural. Es un poco Barbie y no es el tipo de cara que yo hago". Según este experto en medicina estética, que ha llegado a tratar a la mismísima Demi Moore en su clínica de la parisina Avenue Montaigne, es evidente que Cher se ha realizado "varias rinoplastias, implante de pómulos y una mejora considerable en sus dientes, ya que son muy diferentes a los que tenía cuando era joven".

Sin manchas, sin arrugas

La doctora Jiménez está de acuerdo con él, y añade las características que han hecho que su piel parezca la de alguien mucho más joven. "Está impecable, sin manchas, con el poro cerrado, sin arrugas pero natural, luminosa. Es producto de cuidados semanales con láseres, mesoterapias con acido hialurónico, oxigenoterapias y cuidado para exponerse al sol. Creo que es muy fan de la fototerapia, de la luz LED casi diariamente. Probablemente tenga un plan nutricional estricto a base de verduras y frutas y suplementos antienvejecimiento, antioxidantes y vitamínicos", concluye. Los labios son otra de las partes de la cara de la artista que la hacen parecer mucho más joven. El doctor Dray recuerda que los tiene "muy perfilados, seguramente por productos de relleno. Hay que tener en cuenta que se ha hecho mucha cirugía desde los 40 años. Al principio parecía un poco hombre, pero hay que reconocer que ahora está muy guapa".