Sofía Palazuelo, la futura nuera del duque de Alba que nunca sonríe

Sofía Palazuelo se convertirá en la primera nuera del duque de Alba en un mes y medio. La boda se celebrará el próximo 6 de octubre en la capilla del palacio de Liria, donde también se casó Jacobo, el primo de su novio, hace unos años. Sera un bodón donde los invitados por parte de Fernando Fitz-James, futuro marido de la joven que nunca sonríe, darán la clave de cómo se encuentran las relaciones entre los hermanos Alba. Hasta hace poco eran regulares.

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Cayetano se habla lo justo con Carlos y menos aún con el conde de Siruela. Según él mismo contó, el enfado venía porque “no me quiso vender sus vacas”. Así están las cosas por parte del novio. Pero como dicen los que saben de líos familiares: “Lo que no arregla una boda, lo soluciona un bautizo”.

En el caso de la joven que nunca sonríe, su padre, arquitecto de profesión, tuvo desencuentros con unos socios que acabaron en denuncias. Divorciado de la madre de Sofía, vive fuera de España, entre Perú y Estados Unidos, donde también tiene negocios. Volvió a casarse y tiene dos hijos con su segunda mujer.

La distancia, con un océano por medio, no será un escollo para que Fernando Palazuelo sea quien acompañe a su hija al altar de Liria. Quien lo conoce asegura que será un activo por su aspecto de actor tipo Richard Gere en el caso de que haya exclusiva de la boda, algo que aún está por decidirse. La joven que no sonríe ya ha hecho sus pinitos en ese mundo de los posados publicitarios para promocionar el palacio Galiana (Toledo), que se alquila para bodas y eventos varios.

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Sorprendía esta exposición pública cuando la joven que no sonríe filtraba a través de amistades que no quería convertirse en personaje de la prensa rosa. Ese posado lo desmentía. A veces, es difícil rechazar esas proposiciones; aunque en el caso de su novio Fernando lo ha mantenido a rajatabla. El duque de Alba y Matilde Solis, padres del chico, saben lo que significa dejar de ser personas privadas. Cruzar a la otra orilla tiene sus compensaciones económicas, pero también sirve para dar altavoz a las noticias desfavorables. Y tanto el duque de Alba actual como su exmujer lo han vivido en carne propia.

Esta semana hemos vuelto a ver a la pareja en su último verano de solteros navegando por el Mediterráneo. Aparentemente no sabían que había paparazzi cerca. Fernando, más natural, y la joven que no sonríe, en su estilo: mirando al frente sin mover un músculo del rostro. Hierática y sin mostrar esa sonrisa que a estas alturas de la historia de amor echamos en falta.

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Hay un cierto parecido con Georgina Rodríguez, la novia de Cristiano. Aunque en este caso la aspirante a modelo ya explicó que no sonreía porque llevaba brackets. De la futura nuera del duque de Alba se desconocen las causas de esa falta de empatía con el mundo. Incluso sorprende que, a mes y medio de su boda, las imágenes en el barco con su chico sean tan poco emocionantes teniendo en cuenta que las fotos eran robadas... ¿o no?

Habrá que esperar al día de su boda. Parece que el duque de Alba quiere que se repartan a todos los medios algunas fotos de la ceremonia de forma oficial. Ojalá sea así y por fin podamos ver a Sofía Palazuelo sonriendo al universo.