Begoña Gómez explica el error de protocolo de Pedro Sánchez en el Palacio Real

Pedro Sánchez como presidente de Gobierno fue el primero (junto con su mujer Begoña) en saludar a los reyes en la recepción posterior al desfile en el Palacio Real. En vez de dejar paso al resto de invitados se colocaron junto al Jefe del Estado y doña Letizia, que son los únicos que deben permanecer en lo que se llama el “besamanos”. Este error de protocolo se difundió rápidamente a través de las redes y se convirtió en tema de conversación durante el cóctel: “No se habla de otra cosa”, comentaban en los corrillos los que habían visto a través del móvil la escena. Al preguntar a Begoña Gómez qué había sucedido explico el error de la siguiente manera y mantuvo una charla con Vanitatis sobre su faceta de esposa de presidente de Gobierno...

-Se está comentando el error de protocolo que habéis vivido en el saludo a los Reyes ¿Qué ha pasado?

-Antes de entrar nos dijeron que esperáramos a que terminaran de saludar los reyes. Así lo entendimos y por eso nos colocamos allí. No hay más interpretaciones y menos pensar que queríamos protagonismo. Nos avisaron y se solventó.

-¿Cómo llevas las críticas desde que eres la mujer del presidente de Gobierno?

-Hay que asumirlas y dar la importancia que tienen. Nada más.

-¿Y vuestras hijas se han amoldado bien a la nueva vida en el palacio de la Moncloa?

-Mis hijas siguen yendo al mismo colegio desde que eran pequeñas, mantienen las mismas amistades y sus horarios son los de cualquier escolar. Hacen deberes, juegan, cenan y se van a la cama. Hay muy poca diferencia con respecto a su vida habitual de antes

-¿Echan de menos a su padre? Ahora las vera menos...

-Pedro es un padrazo y los dos estamos pendientes de ellas, pero saben en qué posición está ahora su padre. La semana que viene tienen exámenes y la verdad es que son estudiosas y responsables.

-¿Viste los memes que te hicieron por el vestido que elegiste en vuestro encuentro con el presidente Trump y su mujer?

-Síi, me los mandaron. Entiendo que haya gente que no le gustara, pero a otra sí.