Santiago Abascal (Vox) publica sus fotos más familiares en plena tormenta política

Santiago Abascal, líder de Vox, se ha convertido ya en el político con mejores posibilidades en las redes sociales, especialmente en Instagram, una plataforma en ocasiones ninguneada por nuestros políticos por entenderla como una herramienta más 'frivolona' que ese altavoz para la opinión supuestamente 'sesuda' que es Twitter.

[LEER MÁS: La faceta 'influencer' de Santiago Abascal (Vox)]

Con muchos más seguidores que Pedro Sánchez y Pablo Iglesias, doblando la cifra de Pablo Casado y solo 3000 seguidores menos que Albert Rivera, la progresión de Abascal tiene mucho más mérito teniendo en cuenta que es un recién llegado a la primera línea política. Además, la del líder de Vox se parece más a la cuenta de un 'influencer' que a la de un político al uso: rodeado de caballos, haciendo running, sacando su 'mirada azul' estilo Zoolander, haciendo flexiones mientras bebe de un río o luciendo pechamen en la playa…

Pero llaman especialmente la atención las dos últimas imágenes que Abascal ha subido a su cuenta de IG en plena polémica política por las condiciones impuestas por Vox al PP para recibir su apoyo en el parlamento Andaluz. ¿Está humanizando su perfil?

En la primera de ellas, le vemos junto a sus cuatro hijos, y en la segunda, especialemente bella, recibiendo un beso de su mujer… En el resto de sus publicaciones apenas aparecen miembros de su familia.

Se nota un pequeño giro de Abascal hacia su vertiente más familiar: si hasta ahora su cuenta aparecía sembrada de fotografías individuales en sus distintas facetas de montañero u orador, y de vez en cuando aparecía alguna imagen más personal (con su mujer o alguno de sus hijos en la montaña o la playa), las últimas tienen que ver con su entorno familiar en su faceta más íntima.

¿Y quién son ellos, los hijos y la esposa?

Lidia Bedman Lapeña acumula 48.000 seguidores en Instagram. Bueno, seguidoras la mayoría. Forma parte de ese reducido grupo de mujeres que vuelcan en internet todos los detalles de su embarazo y su posterior maternidad. Sus experiencias como madres sirven de aliento e inspiración a otras mamás que llegan a idolatrarlas y que siguen fielmente cada uno de sus consejos. Lidia ha conseguido hacer de su maternidad su fuente de ingresos y en la actualidad muchas marcas de moda (sobre todo infantil) se pirran por colaborar con ella para que les nombre en algunos de sus 'post'.

Sin embargo, si hay algo que llama poderosamente la atención de sus plataformas virtuales, es el recelo con el que ha protegido siempre la identidad de su marido. De ahí que llamae aún más la atención lo que ha hecho Abascal en si Instagram. A sus dos hijos, Santi y Jimena, de dos años, sus seguidores les han visto crecer, ya que Bedman comparte una imagen suya casi a diario para ilustrar sus 'looks' infantiles o simplemente para comentar una graciosa anécdota. Pero de Santiago Abascal, el feliz papá que presumía de retoño el día de las elecciones, no hay ni rastro. Apenas alguna imagen imperceptible de él o alguna parte del cuerpo, pero nada que permita identifica al líder de Vox, al que ni siquiera la propia Lidia nombra. Un hecho muy curioso si además tenemos en cuenta que Santiago tiene dos hijos mayores de una relación anterior a los que la 'blogger' sí muestra en sus redes sociales asegurando que son los mejores hermanos que sus dos retoños pudieran tener. Lidia sí hace alusiones a su marido –como cuando narró en su canal de Youtube el momento en que ella le pedía ayuda con la respiración mientras estaba de parto, pero él estaba concentrado con su móvil–, pero no quiere ponerle nombre ni apellidos. Al menos hasta ahora.