Alessandra de Osma asume en España el legado cultural de su linaje

Estamos acostumbrados a ver a Alessandra de Osma en las revistas del corazón o en las de moda. Su matrimonio con el príncipe Christian de Hannover fue una historia fabulosa para la prensa social europea, aunque lo cierto es que en Perú ya era muy conocida. La abogada limeña es heredera de un importante linaje vinculado a las artes y a la cultura, un legado que ahora llega a España de la mano de la feria ARCO, que este año dedica sus esfuerzos al arte peruano. Alessandra de Osma y su familia han prestado una de sus obras emblemáticas al Museo del Prado para que el público pueda disfrutarla, dentro del programa de la pinacoteca 'La obra invitada'.

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'Matrimonios de Martín de Loyola con Beatriz Ñusta y de Juan de Borja con Lorenza Ñusta de Loyola' es un extraordinario ejemplo de la pintura virreinal procedente del Museo Pedro de Osma en Lima. Con evidente intención propagandística, esta obra representa en un mismo tiempo y espacio dos uniones matrimoniales que tuvieron lugar con cuarenta años de diferencia y en lugares tan alejados como la Península Ibérica y el virreinato del Perú. El préstamo ha sido posible gracias a la colaboración del Ministerio de Relaciones Exteriores del Perú y del Museo Pedro de Osma de Lima.

Alessandra de Osma es descendiente de Pedro de Osma Gildemeister, un filántropo y gran amante de la historia que vivió entre 1901 y 1967, hijo del político peruano Pedro de Osma y Pardo, fundador del diario 'La Prensa'. Buena parte de la vida de Osma Gildemeister se dedicó a coleccionar objetos de arte de los siglos XVI al XVIII. Pinturas, esculturas y objetos virreinales y de la antigua plástica andina fueron parte de este gran tesoro. Su fortuna procedía del negocio del azúcar que se producía en la ciudad de Trujillo.

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Esta gran colección se encontraba en una casona de inicios del siglo XX, que se ubica en el barrio limeño de Barranco y que fue el escenario de una de las recepciones que tuvieron lugar con motivo de la boda de los príncipes. Tras la muerte de De Osma Gildemeister, la casa pasó a manos de Pedro y Angélica de Osma, hijos de este, y se creó la fundación que lleva el nombre de ellos, con la idea de salvaguardar y mostrar el legado de su padre. Ahora, Alessandra de Osma representa a esa fundación en España.

La Fundación Pedro y Angélica de Osma Gildemeister es una institución sin fines de lucro cuyos beneficios se dedican al sostenimiento de obras sociales en apoyo a niños y ancianos en situación de abandono y a la difusión cultural y preservación de las obras de arte del Museo Pedro de Osma.

Aparte de fomentar la cultura a través del Museo Pedro de Osma y de su galería de arte temporal, la Fundación colabora con otras 40 instituciones como son asilos de ancianos, comedores populares, centros de atención residencial, instituciones de apoyo educativo a niños a nivel intrahospitalario o centros de atención educativa para niños con discapacidad, entre otros.

En 1996, el Museo Pedro de Osma abrió sus puertas de forma permanente y hoy es uno de los más visitados de Lima.