Hablamos con Tita Cervera: del 'susto' que le ha dado Pedro Sánchez a su extraño nexo con Angelina Jolie

Carmen Cervera no se prodiga en Madrid más allá de las inauguraciones en el museo Thyssen, reuniones relacionadas con su labor en el patronato o sus conversaciones con el Ministerio de Cultura. Desde que su domicilio fiscal fue establecido en Andorra, debe pasar 184 días fuera de España para no tener nuevos problemas con Hacienda. Las gemelas Carmen y Sabina ya son preadolescentes y la madre prefiere controlarlas más de cerca. Con su hijo, las relaciones van montadas en una noria: unas veces se quieren y otras se distancian, como sucedió la pasada Navidad, que cada uno la pasó por su lado. Borja lo hizo en Gstaad con su familia y Tita en Andorra con su niñas y su sobrino Guillermo.

La convocatoria a la que siempre acude la baronesa es la entrega de las medallas de oro que creó hace cuatro años la mecenas y artista Mayte Spínola. La baronesa recibió la suya en el apartado Filantropía y explicó a Vanitatis cómo se encuentran las negociaciones con el Ministerio de Cultura, cuya cabeza visible es José Guirao. Desde hace tiempo, sus abogados ya tienen preparado el contrato para la cesión definitiva de su colección privada que se exhibe en el palacio de Villahermosa, anexo al museo Thyssen.

“Desde hace años la he cedido gratuitamente y creo que ya es hora de llegar a un acuerdo definitivo. Me gustaría recordar el dinero que deja mi colección a Madrid. Entre nueve y diez millones de euros al año. Y no es una cifra que me invente, sino que apareció en el BOE. Hay una moratoria hasta dentro de dos meses y espero que se resuelva”.

Para Carmen, la convocatoria de nuevas elecciones le preocupa porque puede retrasar este acuerdo y más si hay un cambio drástico en la presidencia de Gobierno. El préstamo de esta colección propia se firmó en 1999 por diez años y después se fue renovando. Y desde el 2017 las prórrogas son de tres meses. “Estoy esperanzada en que se resuelva”.

Vanitatis: ¿Te viene bien la convocatoria de elecciones de Pedro Sánchez?

Carmen Cervera: “Depende, porque la cosa se puede alargar y eso me preocupa. Por otra parte, un decreto ley en los últimos días de Gobierno me vendría bien.

Extrañas coincidencias

La baronesa también tuvo su tiempo para tratar temas menos intensos. Esa noche lucía un modelo vintage en color champán y explicó la anécdota que rodeaba este vestido. “Me lo compré en California hace años y lo tenía guardado. Y de pronto hace unos años veo a Angelina Jolie con uno exactamente igual. Decidí sacarlo del armario y contar que Angelina copia a Carmen Cervera”. Simpática y extrovertida no sabía cuál era la razón por la que Blanca y Borja no habían acudido a la fiesta cuando habían confirmado y tenían sus asientos en primera fila: “Son jóvenes”.