Sir David Beckham renueva sus votos con Madrid en su último acto publicitario

David Beckham es uno de esos personajes que siempre ha caído bien. Ha sido uno de los futbolistas más elegantes, tanto dentro como fuera del campo. En su regreso a Madrid no ha defraudado y ha vuelto a renovar sus votos con la ciudad en la que asegura: "Fui muy feliz. Tengo unos recuerdos muy bonitos de mi estancia en España. Y mi familia también". Recordó que Cruz, el tercero de sus hijos, nació en la clínica Ruber y "por lo tanto, parte de nuestra vida está aquí".

Sir David Beckham apareció impecable, con un tres piezas en tonos grises, en la presentación de la nueva línea de relojes de la firma suiza Tudor, de la que es embajador desde 2017. Mantiene un físico impecable y el buen talante de siempre. Previo a su aparición, se proyectó un vídeo donde se le vio practicando apnea con el campeón del mundo. Esta habilidad necesita gran concentración y una excelente forma física, dos cualidades comunes a su vida deportista. Explicó que cuando le propusieron someterse a la prueba de apnea no puso ningún inconveniente: "Me gustan los retos". Una vez que terminó la exposición, no desapareció de la tarima, sino que se quedó para fotografiarse con las invitadas que lo quisieran y que fueron casi todas.

Beckam es una apuesta segura para las marcas. En sí mismo ya es una máquina de hacer dinero. Según la revista 'Forbes', que analiza el minuto a minuto de los grandes capitales personales, el futbolista recibe cerca de 40.000 euros diarios solo por los derechos de imagen de una de sus empresas. Pasó cuatro temporadas en el Real Madrid como galáctico, consiguiendo una Liga y una Supercopa de España. Ahora ha vuelto a rememorar sus palabras de aquellos años: "Siempre tendré una unión muy fuerte con España a través del nacimiento de nuestro hijo. A ellos les encanta España y viajan a menudo". Brooklyn, su hijo mayor, se dedica a la fotografía y en varias ocasiones ha hecho rutas turísticas por el norte de España.

La estancia en el club blanco convirtió a David Beckham en el prototipo de la belleza masculina para el mundo femenino nacional. A ese físico, tan diferente al de otros futbolistas, se unía que el muchacho era de trato agradable y educado. Frente a esa amabilidad se encontraba su mujer Victoria, cuya manera de ser era mas fría y distante. La diseñadora de moda reconoció hace un tiempo a la revista 'Vanity Fair' que ella siempre iba a ser la "mujer antipática", ante la apariencia angelical de su marido. Pocos confiaban en que el matrimonio fuera duradero.

Victoria y David forman un buen equipo tanto en la parte afectiva como en la económica. Cuatro hijos que no han sacado los pies del tiesto, que estudian y tienen aficiones musicales y deportivas sin tener que ejercer de 'hijos de', con perfil Chabelita o Kiko Rivera. El matrimonio forma parte de la alta sociedad británica y una de sus últimas apariciones públicas fue en la boda del príncipe Harry y Meghan Markle.

No solo le gusta España, sino que también consume productos nacionales. Uno de ellos, el vino Castillo Ygay, de Marques de Murrieta. La primera vez que lo probó fue cuando jugaba en el Real Madrid y con una campaña publicitaria que realizó. El regalo, además de la compensación económica, fue una caja de seis botellas de este vino, que también es el preferido del Rey emérito.