Sin propiedades ni ahorros, la situación económica "ahogada" de Lolita

Hay personajes que, hablen de lo que hablen, son un imán para la audiencia. Lolita Flores, actriz, cantante, presentadora y mujer todoterreno en el campo de las artes escénicas, es una de ellas. Sus entrevistas suelen pecar de honestidad, lo que la convierte en una rara avis en el mundo de la televisión. Este fin de semana volvió a dar muestras de ello en 'Sábado Deluxe', donde habló abiertamente de su situación económica. A pesar de llevar trabajando desde que era joven, la actriz reconoció que en el plano financiero está "ahogada".

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La hija de Lola Flores explicó que había vendido su casa para poder pagar a Hacienda una multa "de alrededor de 600.000 euros". "He pedido ayuda a amigos y anticipos. No se me cae la cara de vergüenza. No tengo nada ahorrado. No tengo casa ni un colchón, pero la nevera la tengo llena. Para comer todavía tengo, pero ahorrado nada. Mi madre me dejó estas piernas maravillosas, mucho arte y mucho amor, pero dinero nada de nada", explicó.

"Estoy ahogada", admitió Lolita, que explicó que los problemas empezaron después de casarse con Pablo Durán y vender la exclusiva del enlace a una revista. "A raíz de esa exclusiva me hicieron una inspección y me empezaron los problemas", reconoció.

Medalla de Oro

Pero Lolita se rehará pronto. En abril dio varios conciertos junto a su hermana Rosario en Miami. Fue un paréntesis, ya que hace tiempo que aparcó su carrera musical para enfocarse en su faceta como actriz, un terreno donde está marcando la diferencia. Lleva varios meses de gira por España con 'Fedra', una obra de teatro en la que se convierte en el instrumento de las pasiones humanas que no ha hecho más que cosechar el aplauso de la crítica y el público. El año pasado también participó en la serie de televisión 'Centro médico', pero su principal fuente de ingresos es su participación en 'Tu cara me suena'.

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Su trayectoria le ha valido diversos reconocimientos, el último la Medalla de Oro al Mérito en las Bellas Artes, que le entregaron los Reyes en febrero. A pesar de que no para de trabajar (también tiene contratos publicitarios, como el de la crema Nivea), y lo lleva haciendo prácticamente desde la adolescencia, Lolita no tiene apenas patrimonio. De hecho, vive de alquiler desde hace unos meses en un piso en el Soto de La Moraleja, la misma zona donde estaba la mítica El Lerele, la casa familiar que vendieron hace un par de años.

En el Registro Mercantil, el nombre de Lolita aparece vinculado a cuatro empresas. La primera, Producciones Artísticas Sabor SL, no presenta cuentas desde el año 1994. La segunda, Producciones Artísticas GYF, tampoco muestra indicios de actividad desde el año 2013. Ese ejercicio declaró unas exiguas ventas de 4.171 euros, aunque también un activo de 1.340.728 euros.

También languidece Porcientos SL, de la que es socia, dedicada al comercio al por mayor de textiles. La hija de la Faraona trató de rentabilizar el ingenio familiar fabricando camisetas, toallas y otros elementos decorativos con frases conocidas de su madre. No presenta cuentas desde 2010, cuando ganó más de 270.000 euros. La misma suerte ha corrido su incursión en el negocio inmobiliario, Riola Inversiones, de la que es administradora y de la que no hay datos desde 2013.