Casa de Alba, continúa la guerra: el nuevo desprecio del duque a su hermano Cayetano

Se viven tiempos convulsos en el seno de la familia de los Alba. Desde que el libro 'De Cayetana a Cayetano' (La Esfera) saliera a la luz a principios del mes de septiembre, y con él Cayetano Martínez de Irujo destapara los trapos más sucios sobre su vida y sobre algunos miembros de su familia, ha quedado claro que la relación entre él y su hermano, Carlos Fitz James Stuart, Duque de Alba, no es muy cordial y hace mucho tiempo que no lo es.

[LEA MÁS: Una semana del libro de Cayetano: mucha polémica pero... ¿y ventas?]

Desde que Carlos Fitz-James Stuart asumiera su papel al frente de la Casa de Alba, Cayetano siente que se le está arrinconando. Entre algunas de las decisiones que el duque de Alba ha tomado estaría la de apartar a su hermano de las empresas familiares. Cayetano Martínez de Irujo se ha sentido ninguneado y no ha dudado en confesarlo.

Hasta ahora, no había existido reacción por parte del duque de Alba. Si bien no había huido de la prensa y se había limitado a defender su gestión al frente de la Casa de Alba, sí que ha preferido optar por no entrar al trapo de manera directa ante los ataques de su hermano. Pero este sábado 14 de septiembre, Carlos Fitz-James Stuart ha decidio romper su silencio y ha concedido una entrevista a 'El País' donde ha dejado claras algunas cosas a su hermano.

Ante las incesantes críticas de Cayetano hacia su hermano mayor, el duque se ha defiende ahora con contundencia: “Cuando heredé la Casa de Alba me encontré una deuda muy grande que hay que equilibrar. Yo tengo cincuenta nóminas al mes que hay que pagar. Así que tuve que coger el toro por los cuernos”.

El primogénito de la duquesa de Alba se retrata, una vez más, como el salvador de una delicada situación administrativa de la Casa de Alba que está tratando de enderezar de la mejor manera posible, dejando entrever que nadie, antes de él, había sido capaz de hacerlo.

El duque no se queda ahí. En un momento dado deja muy claro cuál es la diferencia entre él y su hermano y marca una pronunciada distancia entre ambos: “La Casa de Alba es el duque de Alba y sus dos hijos y los demás pues son hermanos del duque de Alba. Y esto es así y es importante que se sepa”.

No sabemos cómo habrán sentado estas palabras a Cayetano ni si reaccionará a ellas. De ser así, estaremos asistiendo a un nuevo capítulo de esta guerra de alta alcurnia que, de momento, parece no tener fin.