Más de un millón de euros: la 'multa' de Hacienda al 'doctor Vilches'

Compras en Mercadona o en Leroy Merlin, reparaciones del coche, la factura del dentista o la comunidad de propietarios. Son algunos de los gastos que se dedujo Jordi Rebellón a través de su sociedad Traspapelat y que los inspectores de Hacienda detectaron como 'no necesarios para su actividad'. Uno de los varios tirones de orejas que le ha dado la Agencia Tributaria y que se han traducido hoy en un poderoso dolor de cabeza para Jordi Rebellón, el actor conocido por interpretar al doctor Vilches en la serie 'Hospital Central'.

El intérprete ha perdido dos recursos contra Hacienda por su declaración del IRPF, tal y como avanza 'Cinco Días'. Los jueces de la Audiencia Nacional han ratificado lo que dijeron los inspectores: que el actor facturaba su trabajo en series, películas y publicidad indebidamente a través de una sociedad, y que además se deducía gastos que no tenían nada que ver con su función como intérprete. Dos sentencias que le condenan a pagar 1,34 millones de euros por las declaraciones de 2005, 2006 y 2007. Además de las costas judiciales, claro.

La facturación a través de sociedades vuelve una vez más a estar detrás de los problemas con Hacienda de rostros conocidos. Los últimos casos conocidos que han pasado por los tribunales han sido el de Carmen Machi (famosa en la televisión por su papel en 'Aída') y el de Rebellón.

En el caso de la actriz, el Tribunal Superior de Justicia de Madrid desestimó en verano un recurso que había presentado y le puso una multa de 83.155,19 euros por una infracción tributaria leve en concepto del IRPF de 2007 a 2009. Previamente, tuvo que regularizar su situación con el fisco con una declaración paralela a través de la cual pagó más de 237.000 euros.

La sanción estaba motivada porque Machi creó una sociedad, Mama Floriana, "solo para eludir los tipos impositivos más elevados en el IRPF y deducir gastos que no eran deducibles en el impuesto sobre sociedades".

Un caso paralelo al de Jordi Rebellón, que usó la sociedad Traspapelat para facturar por sus servicios un total de 762.238,59 euros en los ejercicios 2005, 2006 y 2007, mientras que la firma retribuyó al actor tan solo 72.121,44 euros. Al intérprete no se le admitieron como gastos deducibles de la sociedad compras en supermercados, gastos en reparación de automóviles o de "celebraciones y fiestas particulares". Aunque ha peleado judicialmente, finalmente el actor ha sido condenado a pagar ese millón largo de euros con el que comenzábamos esta noticia.