Greta Fernández, sorpresa de los Goya 2020: de su novio italoargentino a sus redes
La intérprete es una de las grandes protagonistas de esta edición. Recorremos algunos de los datos vitales de la hija de Eduard Fernández
Si hay un plano del cine español de 2019 realmente conmovedor, ese es aquel con el que cierra 'La hija de un ladrón'. La película de Belén Funes, una especie de 'Techo y comida' a la catalana, ahonda en la marginalidad de cierta clase social y en la relación de una hija y un padre que no siempre ha estado ahí. Ese padre y esa hija, encarnados por Eduard y Greta Fernández, también lo son en la vida real. Y se nota.
Greta, nominada al Goya como mejor actriz protagonista por esta película, se ha labrado una reputación profesional por encima del buen nombre de su padre (o de su madre, la escritora Esmeralda Berbel). Amante de la discreción, poco a poco han ido surgiendo datos sobre cuál es su vida detrás de las cámaras. Por ejemplo, sabemos que sale con un chico italoargentino llamado Luca que no vive en España y del que prefiere no decir demasiado. Según han publicado varios medios, el chico en cuestión escribe sobre música y política, y ella lleva años intentando convencerle de que se traslade a vivir a España.
Más allá de su vida sentimental, a Greta no le gusta nada que la llamen 'influencer'. Ya ha comentado en alguna entrevista que, en su caso, es algo circunstancial, ya que su profesión es la de actriz. Modelo de fotografía en varios proyectos y protagonista de una cuenta de Instagram modélica (tanto en lo visual como en la intencionalidad), la joven también ha protagonizado varios videoclips de C. Tangana o Gabriela Richardson. Además, le encanta el mundo de la fotografía y ver películas de directores como Michael Haneke o Hayao Miyazaki (según publicaba Beatriz Martínez en 'El Periódico', su película favorita es, precisamente, 'El viaje de Chihiro')
Vive en Madrid desde hace poco tiempo
Tras ganar la Concha de Oro a la mejor interpretación femenina en el pasado Festival de San Sebastián (también por 'La hija de un ladrón'), estaba claro que los siguientes pasos en la carrera de la joven estaban en Madrid. Y así es como se ha trasladado a la capital, donde le han surgido varias oportunidades. Sin embargo, es consciente de que viajar también forma parte de su profesión. Hace apenas un año se trasladó a Galicia para protagonizar una historia muy especial, la de 'Elisa y Marcela', las primeras mujeres que contrajeron matrimonio en España. Una historia dirigida por Isabel Coixet en la que compartió cartel con Natalia de Molina y en la que pudo cumplir con su compromiso con la comunidad LGTBI (algo que también ha manifestado en varias entrevistas).
Nacida en Barcelona en 1995, a sus 24 años Greta puede presumir de que, hasta hace muy poco tiempo, nadie había reparado en que su padre era Eduard Fernández. Sin necesidad de publicidad adicional, ya ha estado presente en películas como 'La enfermedad del domingo' o 'No sé decir adiós'. Apasionada de la moda, sabe que las redes son una buena herramienta de promoción para los actores pero también entrañan peligro (para ellos y para el común de los mortales). En su futuro inmediato no solo está su nueva vida en la capital, sino varios proyectos como la serie 'Foodie Love'. La nominación a los Goya impulsará, aún más, lo que más le importa en estos momentos: su carrera.
Si hay un plano del cine español de 2019 realmente conmovedor, ese es aquel con el que cierra 'La hija de un ladrón'. La película de Belén Funes, una especie de 'Techo y comida' a la catalana, ahonda en la marginalidad de cierta clase social y en la relación de una hija y un padre que no siempre ha estado ahí. Ese padre y esa hija, encarnados por Eduard y Greta Fernández, también lo son en la vida real. Y se nota.