Elena Tablada, criticada por un hashtag en el Monumento al Holocausto de Berlín

Seguramente Elena Tablada no esperaba que una a priori inocente foto en Berlín, donde había acudido a recibir el nuevo año junto a su marido Javier Ungría, fuera a revolucionar sus redes.

La diseñadora, como tantos otros miles de turistas, posó en uno de los puntos más emblemáticos de la capital alemana: el Monumento al Holocausto, erigido en memoria de los judíos asesinados en Europa. Pero no eligió bien sus palabras en el texto que acompañaba al selfie.

El hashtag #babyintheoven ('bebé en el horno') hace referencia a su estado de buena esperanza pero por supuesto no ha pasado desapercibido para sus seguidores por sus desagradables connotaciones históricas.

Edificado en las cercanías de la Puerta de Brandenburgo entre los años 2003 y 2005, el monumento se compone de una cuadrícula formada por 2.711 bloques de hormigón de diferentes alturas, que permite que los visitantes elijan su camino de entrada y salida.

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El hecho de que aparezca sonriendo en la foto tampoco ha gustado a más de un usuario que se lo ha reprochado con comentarios del tipo “posar sonriente en el monumento a la memoria de los judíos asesinados no procede, creo yo”.

Su 'pifia' ha sido suficiente para que los internautas la hayan elevado ya al altar de las meteduras de pata digitales más sonadas de los últimos meses.

Aunque por supuesto, en su calidad de influencer, han predominado los mensajes para elogiar su estilismo o para recomendarle sitios donde comer el mejor schnitzel.