Jordi Évole: cataplexia en directo, amor sólido y cuentas brillantes

Aquel que no conoce su historia está condenado a repetirla. Esa frase, que se atribuye a Napoleón Bonaparte, suele ser cierta, pero a veces incluso cuando se conoce, las cosas ocurren de nuevo. Ese fue el caso de la visita que Jordi Évole hizo al plató de 'El intermedio', donde el Gran Wyoming intentó no hacerle reír en toda la entrevista para que no le volviera a dar un ataque de cataplexia como la última vez que visitó el programa.

Finalmente no lo conseguía y el presentador catalán terminaba muerto de risa mientras su compañero de mesa decía: "Jordi, me vas a joder el programa" antes de pedir que entrara el SAMUR mientras le daba unas palmadas en la espalda a Évole, que acabó sufriendo un pequeño ataque de esta rara enfermedad que padece.

Después de que el programa terminara, el propio Évole se encargaba de lanzar un tranquilizador mensaje a sus seguidores a través de su cuenta de Twitter. "Estoy bien. Wyoming me ha hecho el boca a boca. Todo controlado. ¡Un abrazo para todxs!", escribía con buen humor.

A estas alturas pocos dudan que el de Cornellá de Llobregat ha alcanzado la cima del éxito profesional. El periodista, humorista y guionista es uno de los pocos que pueden presumir de haber logrado entrevistar al papa Francisco o haber compartido una charla tan íntima y emotiva con Pau Donés como la emitida recientemente. Llegar a este punto no ha sido fácil. A sus espaldas hay una trabajada trayectoria con horarios draconianos, viajes por medio mundo, entrevistas difíciles y mucha exposición a las críticas.

Empezó desde abajo y aquel chico que parecía gamberro tiene, a día de hoy, una consolidada carrera en la que se reflejan títulos como 'Salvados' -el programa que le encumbró- o el último, 'Lo de Évole', en el que han aparecido personalidades como Leo Messi o el expresidente del Gobierno José María Aznar.

Cifras positivas

Jordi Évole apunta con tino. Tiene una sola empresa, Producciones del Barrio SL, y no necesita más. Con unas cuentas brillantes, la compañía registró unos beneficios netos de 997.266 euros, casi un millón, en el ejercicio de 2018. Tuvo unos ingresos de 5.088.871 euros. El anterior, en 2017, los números fueron también muy buenos: 3.838.052 euros de ingresos y unos beneficios netos de 1.023.352 euros.

La productora funciona, sin duda: tiene un patrimonio de 2.998.112 euros, un millón más que en el anterior ejercicio, y él es el administrador único. Ante las cifras positivas, el presentador-empresario ha incrementado la plantilla en 13 personas y han pasado de ser 33 trabajadores a ser 46 (el 50% son fijos y el otro 50% son eventuales).

Esta boyante situación económica ha tenido reflejo en su vida personal. Vive en una casa de 280 metros cuadrados en Santa Coloma de Cervellò, un bonito pueblo del Baix Llobregat, la comarca de la que es oriundo, donde se encuentra la Colonia Güell, uno de los complejos arquitectónicos diseñados por Gaudí y convertidos ahora en punto turístico obligado. La casa, un bajo con jardín, la compraron él y su mujer, Ester Delgado, en 2007. Esta no tiene piscina, sí su casa de veraneo.

Afortunado en el amor

Ester Delgado es la fotógrafa que, con los años, se ha convertido en el mejor apoyo y la mejor compañía del catalán desde que ambos contrajesen matrimonio. Jordi y Ester tienen un hijo en común y disfrutan de la buena salud de sus cuentas.

Dedicada a su pasión por la fotografía, Delgado siempre ha preferido mantenerse en un discreto anonimato, alejada de la fama de su marido. "Me dedico profesionalmente a fotografiar personas, lugares, objetos. Lo que más me gusta es esperar hasta captar el mejor momento de cada uno de ellos", advierte en su página web Pura Coincidencia.

El matrimonio y su hijo pasan los veranos y los pocos momentos de relax que tienen en el Port de la Selva, maravilloso enclave situado en el norte de la Costa Brava, en pleno parque natural del Cap de Creus, lugar preferido por la alta burguesía como la familia de los políticos Miquel Roca y Pasqual Maragall, y el cineasta Cesc Gay, por poner varios ejemplos.

Cataplexia y un primo "inmortal"

Algunas de las curiosidades que caracterizan al periodista son la extraña enfermedad que padece y el curioso parentesco que tiene con otro presentador de la pequeña pantalla. Como hemos mencionado al principio del artículo, Jordi Évole sufre cataplexia, una enfermedad que consiste en la pérdida de tono muscular al atravesar emociones intensas como la risa.

Respecto a su vínculo familiar, resulta que Évole es primo de Jordi Hurtado, presentador de 'Saber y ganar' desde 1997. "Su abuelo, Pedro Évole, y mi padre eran primos hermanos", afirmaba el propio Hurtado en una entrevista con Toñi Moreno hace algunos años.