Álex Lequio, genio y figura: reaparece bromeando sobre su mal que dura 'mil años'

Hace unos días, Álex Lequio ingresaba en la Ruber Internacional de Madrid. Con su humor y fortaleza habitual, el hijo de Ana Obregón y Alessandro Lequio informaba en las redes de su estado de salud y él mismo recibía "la condicional" de los médicos que le trataban el pasado mes de diciembre.

Ahora, Álex reaparece en su cuenta de Instagram como nos tiene acostumbrados, con humor y con una fuerza para ganarle la batalla a la enfermedad que siempre intenta trasmitir también a sus seguidores.

En sus Stories, el joven empresario ha colgado dos imágenes muy significativas: la primera es una fotografía junto a su abuelo por parte materna, que ha cumplido 94 años. “Felices 94 a mi fondo de pantalla desde que entendí el valor de la constancia”, escribía el joven junto a la fotografía. También Ana ha querido tener un recuerdo para su padre, que, entre otras cosas, fue campeón de España de natación.

Pero la imagen que mejor refleja el espíritu de Álex es, sin duda, la segunda: junto a una captura de una artículo que habla sobre él, y que por error cifra el diagnóstico “en los primeros días de abril de 1018”, el joven ha escrito una réplica fruto de su sentido del humor y su constancia en la lucha. “Y nos atrincheraremos 1.000 años más hasta ganar la batalla si hace falta”.

Álex Lequio, en la medida que se lo ha permitido la salud, ha continuado trabajando de manera infatigable con su empresa, Polar Marketing, y se muestra muy ilusionado en todos y cada uno de los proyectos que ha ido sacando adelante.

Algunas de sus iniciativas han sido de carácter solidario, como ocurrió el pasado mes de diciembre, cuando tuvo que cancelar su comparecencia en una presentación de un evento organizado por Morrison a favor de la Fundación Caico.