Ana Soria, la novia de Enrique Ponce, 'estalla' en Instagram

Quién le iba a decir a Ana Soria, una joven estudiante de Derecho de 21 años, que su vida iba a cambiar tanto en apenas seis días. Mañana miércoles se cumple una semana desde que la revista 'Semana' publicara en exclusiva que el matrimonio de Enrique Ponce y Paloma Cuevas estaba roto, y el mundo del corazón anda desde entonces revolucionado.

La primera en hablar de una tercera persona (la revista no se había atrevido a hacerlo) fue la periodista Beatriz Cortázar. Sus palabras, muy medidas, en la radio fueron ratificadas el lunes por el propio torero, que entró inopinadamente en 'Sálvame' para echar un rapapolvo a los medios y, de paso, confirmar que estaba "ilusionado" con esta joven ya no tan desconocida. Para cuando Ponce confirmó la historia, el rostro de Ana estaba ya en casi todos los medios de comunicación y hasta su abuelo José Luis, un empresario muy conocido en Almería, había dado una entrevista en Telecinco.

Ha hablado Ponce, también han hablado Paloma Cuevas y su entorno, pero poco se sabe de lo que opina la propia Soria de este nuevo mundo en el que acaba de introducirse. Solo a través de un mensaje enviado a Rafa Mora la joven se declaró harta de las "mentiras" que se están vertiendo sobre ella. "No se puede dar credibilidad al primero que llegue", dijo Ana en Telecinco por boca del colaborador.

Sin embargo, la curiosidad por esta bellísima mujer ha estallado de forma nuclear. La joven, que apenas cuenta con 11 publicaciones en Instagram (alguna de esas fuentes de dudosa credibilidad afirma que ha hecho 'limpieza'), ha cosechado en el plazo de unos días miles y miles de seguidores. Actualmente tiene cerca de 30.000 seguidores, aunque, según pasan las horas, el número sube como la espuma.

La estudiante de Derecho ha aprovechado el interés que se ha creado sobre ella para mandar un mensaje y denunciar algunos perfiles de Instagram que están suplantando su identidad. "Me haríais un favor denunciando estas cuentas", pide, y a continuación recopila cuatro perfiles que no corresponden con su verdadera identidad. Además, Ana ha aprovechado para agradecer a su mejor amiga su apoyo incondicional en estos días que sin duda deben estar siendo de mucha presión. Lo ha hecho citando una de las canciones más conocidas de El Arrebato: "Éramos una familia que se divierte y se defiende, cuántas guerras en la espalda, guiñándole un ojo a la suerte, y de repente se paró el reloj y volvimos a cantar letrillas por José".