Enrique Ponce: la lista de amigos que arropan al torero en su nueva vida

La nueva relación amorosa de Enrique Ponce con Ana Soria, la estudiante de Derecho de 22 años, ha marcado un antes y un después en la vida aparentemente estable del torero. Atrás ha dejado 24 años de matrimonio además de tres de novios con Paloma Cuevas, con la que, por el momento, sigue casado.

A finales de la semana pasada no habían iniciado los trámites de separación, que según confirman a Vanitatis será de mutuo acuerdo. Al menos así era la propuesta inicial cuando ya no hubo vuelta atrás.

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El punto de inflexión fue pasadas las Navidades, cuando ya era un hecho que Ana Soria no era la amiga estacional del torero. Así se lo hizo saber en el viaje que ambos hicieron a México y fue la condición para seguir juntos. La joven marcaba los tiempos y Ponce los ejecutaba. Al fin y al cabo, el único que tenía responsabilidad con su pareja por estar casado era el torero.

La joven había tenido un par de novios que, por lo que se supo después, no tuvieron más relevancia. Y de ahí que quien tenía que administrar la “nueva ilusión” era Ponce.

A sus 49 años, con una carrera profesional imparable, dos hijas, un patrimonio sólido y una vida estable, cambiaba las reglas de juego matrimoniales y se enamoraba como un adolescente.

Las filtraciones interesadas convirtieron el romance de copla en la noticia posconfinamiento. Primero fueron declaraciones de Ponce, después testimonio gráfico de su amor subido a la vez a sus redes respectivas, fotografías de ambos en un cocodrilo hinchable, en el barco del 'suegro', paseando y abrazándose en público. La historia de amor en capítulos.

Un serial que se ha visto por entregas ante el asombro de los amigos cercanos y el estupor y el enfado de los más íntimos que coinciden en la misma opinión, como confirman a Vanitatis: “Te puedes enamorar, pero las cosas se hacen de otra manera. No hay necesidad de hacer sufrir a los que quieres y Paloma lo está pasando francamente mal con tanta exposición pública”.

Efectivamente, las amistades se han posicionado y la mayoría con la parte más débil, que son su mujer y sus hijas. El grupo formado por Cristina Yanes, Mónica Valderrama, Fiona Ferrer, Genoveva Casanova, Carolina Herrera, Estrella Morente, Ainhoa Arteta, Eliza Arcaya, Paloma Segrelles y Aneta Mijatovic es el de algunas de las mujeres que forman la guardia de corps que apoyan a la amiga, aunque alguna de ellas también comparte 'me gusta' en el Instagram del torero enamorado…

En el caso de Ponce, sus apoyos vienen preferentemente del mundo del toro. Desde que dejó la finca Cetrina, han sido sus amistades de siempre los que le han acogido en sus casas. La temporada posconfinamiento es muy importante para Ponce, que debe estar en perfecto estado de revista.

Los ganaderos Daniel Ruiz y Samuel Flores son algunas de esas amistades que han mantenido un fuerte lazo de afecto con Paloma Cuevas y que ahora dan cobijo al torero. El primero en el Cortijo del Campo y el segundo en El Palomar.

Las dos fincas se encuentran en Albacete y han sido el lugar de entrenamiento cuando no estaba con Ana Soria en San José, en la casa de los que se supone futuros suegros.

Federico Soria y Rosa Moreno se han convertido en los 'cuidadores' del novio de la hija para que la prensa no moleste. Ahora, según 'Vanity Fair', Ponce ha alquilado una casa en San José, en la costa de Cabo de Gata (Almería), muy cerca de la de los padres de Ana.

En la lista de incondicionales se encuentran Juan Ruiz, hijo del descubridor y apoderado de Ponce del mismo nombre; Víctor, su fisioterapeuta; Agustín Díaz Yanes; la cuadrilla formada por Mariano de la Viña, Jaime Padilla, José Palomares, Dani y Rubén, que conocieron la historia sentimental del "jefe" desde el primer momento.

Con ellos viajó Ana Soria hasta México, donde Ponce comenzó antes de Navidad la gira latinoamericana. Allí vive uno de los grandes amigos del torero, Miguel Alemán Magnani, nieto del que fuera presidente mexicano. En sus fincas y mansiones de la costa de Acapulco se alojaba Enrique con su mujer, Paloma Cuevas, durante años.

La última vez que se les vio a todos juntos fue el verano pasado en la gala solidaria Starlite de Marbella, donde el torero y su mujer ejercían de anfitriones de los Alemán.

De allí también es Laura Herbert Pérez de Sandoval, viuda del empresario José Ramón de Villasanta, que le regaló la ganadería de toros bravos que le han dado a Ponce tardes de gloria en las plazas mexicanas. Doña Laura, que así se la conoce, ejercía de anfitriona en su rancho San José de Carranco en San Luis de Potosí.

Al grupo poncista se ha sumado Javier Conde, mientras que su mujer, Estrella Morente, envía mensajes de cariño a Cuevas en su Instagram.

También Miguel Báez, el Litri, Adolfo Suárez Illana y, por supuesto, el cantante Luis Miguel. Micky, como le llaman la familia Ponce Cuevas, es el amigo incondicional. Ahora habrá que ver por quién se decanta.