Fotos exclusivas: el verano de Enrique Ponce y Ana Soria, un burofax y una supuesta pelea

La relación de Enrique Ponce y Ana Soria se ha convertido en uno de los principales argumentos informativos del verano, en los principales medios de crónica social, en televisión y en las redes sociales, donde son una de las parejas más seguidas. Un verano que parece bucólico y del que os mostramos fotos en exclusiva, tomadas en la playa de los Genoveses, en Almería, en las que vemos al torero en una imagen insólita hasta el momento, acompañado por su pareja y los amigos de ella, pero vayamos por partes...

Decimos que todo resulta idílico, pero no es estrictamente así, ya que, por lo que parece, la pareja está muy pendiente de lo que sucede a su alrededor y de las consecuencias que podría tener. Su noviazgo ha puesto al descubierto personajes colaterales que hasta ahora no tenían vertiente pública. Uno de ellos ha sido Joaquín Giménez, exnovio de la joven estudiante de Derecho, que ya ha aparecido en un programa explicando la etapa que pasaron juntos.

En esas declaraciones contaba que cuando se supo de su existencia en los medios, los abogados del torero le enviaron un burofax en el que informaban que se abstuviera de contar intimidades de Ana Soria. La sorpresa fue mayúscula para Giménez porque en principio no había valorado hablar del año en que estuvieron juntos. Y no solo esa decisión ha sorprendido, sino la publicación de la primera bronca de la pareja. Supuestamente, el desencuentro habría sucedido hace unas semanas en una de las calas que frecuenta la pareja con sus amigos y ante testigos. La propia Ana Soria lo ha desmentido a Adriana Dorronsoro en 'El programa del verano' (Mediaset).

Hasta que no apareció Ana Soria en su vida, los veranos de Enrique Ponce solo tenían un interés mediático para el mundo taurino. Su nombre formaba parte de los carteles más importantes en las ferias de España y sur de Francia. En la temporada 2020, el torero ha encabezado el primer puesto en el ranking profesional con más de seis festejos tras la desescalada. Ha obtenido buenas críticas salvo por su cancelación en la plaza de El Espinar (Segovia), que la mayoría de sus seguidores criticaron. El tiempo libre que le quedaba entre festejo y festejo se encerraba en su finca Cetrina para entrenar.

Todo esto cambió cuando se hizo público su romance con la joven Soria. Comenzó una nueva etapa que mostraba a un Ponce desconocido. Nadie le hubiera imaginado subido a un cocodrilo hinchable publicitando en su Instagram su enamoramiento con frases intensas que acompañaba con corazones. Después llegaron los vídeos de atardeceres en el barco de los futuros suegros abrazando a su chica y los paseos de la mano, sin olvidar sus juegos y actividades en el agua. Si sorprendieron las fotos sobre un cocodrilo hinchable junto a la joven, ahora le hemos visto practicando esquí acuático y subido a una bicicleta de agua en los Genoveses, mostrando una faceta desconocida de un desinhibido Ponce.

Esta vez, la jornada marítima no fue en el barco de los padres de Ana, sino en el de unos amigos y, como ya es habitual en esta nueva vida lúdica, para estas excursiones marítimas al torero le acompañaban la pandilla de teenagers de su pareja. Y, por supuesto, el fiel Julio Maza.