Ana Rosa Quintana, pedaleando por Madrid: sin gafas, cómoda e igual de estilosa

Ataviada con la preceptiva mascarilla y con peinado impecable, pero con una imagen muy alejada de la que luce en el plató de Telecinco, Ana Rosa Quintana se dejaba ver este domingo por las calles de Madrid disfrutando sobre una bicicleta –municipal y eléctrica– de las agradables temperaturas.

La propia presentadora compartía la imagen en su cuenta de Instagram, donde apenas se prodiga, ya que la última foto que subía para sus 108.000 seguidores fue el pasado 15 de marzo. "Domingo en Madrid" era el breve comentario que adjuntaba a la fotografía, en la que luce ropa cómoda, zapatillas, anorak y, por supuesto, la obligatoria mascarilla. Aficionada a la vida sana, reconocía en la revista '¡Hola!' que "no paro quieta, me gusta sentirme activa y quiero seguir así para disfrutar de las cosas que más me gustan y de los míos. Por eso, cuido mis huesos, para estar siempre en movimiento".

Usuarios anónimos y amigos de la comunicadora han llenado de comentarios, mayoritariamente positivos, la publicación. Es el caso de Máximo Huerta, que primero escribía: "Muy bien", y luego añadía: "Y viva Madrid". Aunque también están los que han tirado de ironía, preguntándole 'sorprendidos' si a los madrileños no les tenían "secuestrados".

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N.C.

Más allá de esta escapada sobre ruedas, Ana Rosa ha empezado este nuevo curso con un radical cambio de look –mucho más que el de la desescalada–. Corte, color y peinado se han puesto al servicio de la televisión. Porque cuando vuelves después de una temporada movidita y un verano distinto, cambiar de look tiene mucho más significado, sobre todo si la temporada que te espera por delante es luchar por ser líder de audiencia con Susanna Griso y Mónica López.

La presentadora sigue al pie del cañón cada mañana después de vivir, como reconocía antes de iniciar sus vacaciones de verano, "la temporada más dura de mi vida profesional". Como dijo en directo, "a veces se me quebraba la voz. Cada día hemos contado las historias de los que sufrían y de los que lo superaban. Hemos estado a pie de calle, al lado de la gente; hemos ofrecido momentos de esperanza y hemos sido testigos del tesón y la generosidad de los sanitarios, los aplausos y la responsabilidad ciudadana".