Nacho Cano y su discreta vida post-Mecano dedicado al yoga y los musicales

Su homenaje, de una sola canción, a las víctimas del coronavirus en una Puerta del Sol desierta será tan solo su segunda actuación en público desde que se disolvió Mecano, hace ya 28 años. La anterior la protagonizó en la boda de los entonces príncipes Felipe y Letizia. Esto nos da idea del escaso nivel de exposición pública al que se ha sometido Nacho Cano durante las tres últimas décadas.

Apasionado del yoga, acabó montando su propio centro de Bikram Yoga en Miami –donde decidió marcharse en 2010– con gran éxito, sumado al de otras empresas que tiene en España. Por allí pasaron famosos como Paulina Rubio, su ex Colate y Alejandro Sanz, entre otros. Sin embargo, aquella incursión le hizo aparecer en los Paradise Papers con el consiguiente escándalo.

El yoga, la meditación y el budismo fueron su tabla de salvación tras el convulso fin de su etapa en Mecano. "Después de padecer dos operaciones de estómago, una hernia en la columna y un dolor en aumento, que no podían aliviar las 52 pastillas que diariamente consumía, el yoga fue una auténtica salvación, porque es un arma que fortalece tu existencia", decía en una entrevista con 'La Razón'.

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Mantiene escasa relación con su hermano José María, refugiado en Malta, y que fue el que anunció el final de su grupo en la gala de los Premios Amigo de 1998 sin avisarles con antelación de su decisión. "La ruptura fue un shock. Cuando salimos fuera, yo me puse a llorar, fue como cuando se rompe una pareja, como cuando te dejan sin saber que había algún problema. Ninguno de los dos, ni Nacho ni yo, teníamos ni idea de que realmente José estaba pensando en tirar por otro lado y, claro, fue una ducha de agua fría", dijo Ana Torroja en 2015.

Musicales como 'Hoy no me puedo levantar' o 'A', la música de inauguración para los Campeonatos Europeos de Atletismo celebrados en Barcelona en 2010 o el tema promocional de las competiciones de Fórmula E han sido algunas de sus incursiones artísticas más destacadas durante los últimos años.

Aunque ahora la pasión por el yoga ocupa gran parte de su tiempo, el que fuera novio de Penélope Cruz no está apartado del todo del mundo de la música y una de sus últimas apariciones fue en el festival Sonorama de 2019 como cabeza de cartel. Considerado como uno de los eventos de música indie más importantes del país, por allí han pasado otras figuras atípicas en este tipo de festivales como Raphael.