Alfonso de Borbón da un paso más en los negocios inmobiliarios de la familia

A Alfonso de Borbón Yordi se le conoce por dos cosas. Una, por su parentesco con la familia real (su padre es primo en cuarto grado del rey Juan Carlos). Otra, por su larga relación con nuestra modelo más internacional, Eugenia Silva. El aristócrata se ha conducido siempre con una enorme discreción, y ni siquiera ha querido participar nunca en los reportajes más amables que su mujer protagoniza de vez en cuando en la prensa social. Juntos tienen dos hijos, residen en la zona del Parque del Oeste y llevan una vida "normal", como repite Silva una y otra vez en las entrevistas, donde explica a menudo que no piensa casarse con Alfonso.

El empresario, que estudió en Estados Unidos, es hijo de Alfonso de Borbón Escasany y sobrino de Fernando de Borbón, duque de Sevilla y grande de España. Hasta la fecha, había marcado un perfil profesional propio, sobre todo relacionado con las telecomunicaciones, aunque parece que con la edad, su camino va acercándose más hacia los negocios familiares, sobre todo con vistas a la jubilación de su padre. Borbon Escasany acaba de cesar en el último cargo que mantenía con la filial española de AXA, según los registros oficiales.

Entre seguros y alquileres de equipos de oficina, los hermanos Borbón Escasany comparten una compañía inmobiliaria, Keka SA (Alfonso padre es el máximo accionista con un 56,49% y el resto del capital, un 43,51%, es de su hermano Fernando). Hasta ahora, como se trata de una compañía familiar, también aparecían en el consejo dos de los hijos de ambos: el protagonista de este reportaje, Alfonso, y Francisco Joaquín de Borbón Hardenberg. Pero el BORME del pasado 26 de noviembre anuncia que Borbón Yordi ha dado un paso más en el negocio familiar, convirtiéndose con su padre y su tío en administrador mancomunado de la inmobiliaria.

Locales en Madrid, Barcelona y Sevilla

Keka SA se fundó a mediados de los años 70 y maneja beneficios en los últimos años que oscilan entre los 943.689 euros de 2018 y los 354.641 de 2019. La sociedad posee una serie de inmuebles que se rentabilizan a través de alquileres u obteniendo plusvalías por la compraventa. Entre unos y otros, los activos de la empresa superan los once millones de euros.

En el último informe de cuentas presentado en el Registro Mercantil se detallan, sin embargo, varios compromisos financieros firmados con los bancos en los últimos tiempos. Entre ellos, una hipoteca suscrita con Bankinter en 2018 por dos locales en la calle Núñez de Balboa, en Madrid, cuyo valor asciende a 3.400.000 euros. En abril de 2019 firmaron otra hipoteca de 1.395.000 euros sobre un local en la Rambla de Cataluña, en Barcelona, y dos pisos en Ronda de Atocha, en Madrid.

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Como se ve, los locales bien situados son la 'especialidad' de esta empresa gestionada por los parientes del Rey. La cartera de inmuebles de Keka está formada por activos tan atractivos como oficinas, locales comerciales o garajes en ciudades como Madrid, Barcelona o Sevilla. Los Borbón tienen inversiones en las Ramblas, Núñez de Balboa, en una de las calles más cool de Madrid, Almirante; también en la Plaza Nueva de Sevilla, en la Ronda de Atocha, o en la madrileña Conde de Aranda.

En Madrid, la compañía tiene alquilados algunos de sus locales a comercios de restauración, como la hamburguesería Alfredo’s (en la calle Conde de Aranda), a tiendas de moda o a los supermercados Alcampo (su local de Nuñez de Balboa). En Barcelona, Keka tiene como inquilinos (en el número 106 de Rambla de Cataluña) a la firma de cristalería y joyería Swarovski y una tienda de calzados Geox.

A finales de 2016, esta inmobiliaria familiar, entonces una socimi, saltó a los papeles cuando amagó con empezar a cotizar en el índice para pequeñas empresas, el Mercado Alternativo Bursátil (MAB). La aventura acabó en septiembre de 2017, cuando dejó de operar como socimi para acogerse, de nuevo, al régimen de sociedad anónima, como contó 'Eje Prime'. La polémica vino por las grandes ventajas fiscales de las que se podrían haber beneficiado en su calidad de socimi, algo que medios como 'elDiario.es' calificaron del "chollo fiscal" de los Borbones. Finalmente no ocurrió.

Hasta la fecha, Alfonso de Borbón Yordi había cosechado un razonable éxito en el terreno de las telecomunicaciones con empresas como Teleconnect o Cobra Sky. Entre las ideas que no funcionaron como les hubiera gustado está Palm Kids, una agencia de modelos infantiles que puso en marcha en el año 2016 junto a su pareja, Eugenia Silva. La empresa firmó su extinción el pasado mes de marzo.