Rosalía brilla también en cifras y hace de oro a su madre: su pelotazo empresarial

Se agotan los adjetivos para calificar a Rosalía. La artista empezó siendo un soplo de aire fresco en la escena musical para convertirse con el tiempo en el huracán más dulce y devastador de la música española en las últimas décadas. Hubo un tiempo en que la fiebre vírica por el talentazo de esta mujer de 28 años y apenas 1,65 metros de estatura a punto estuvo de asfixiar al propio fenómeno, pero desde hace un tiempo la catalana ha logrado desenfocarse para poder centrarse en la elaboración de su esperado tercer disco. "Llevo tantos días trabajando en el estudio que ya no sé si es martes o domingo, pero todo bien", escribió hace unos días en Twitter. De Rosalía siempre queremos más, aunque parece que ese trabajo no verá la luz en 2021, según explicó su manager en una entrevista reciente.

Como todo lo que toca la artista, también los resultados de la empresa que administra su madre para gestionar los aspectos menos glamurosos de su carrera (negociación de contratos, por ejemplo) son hiperbólicos. Lo normal es que cuando uno monta una sociedad, entre la inversión inicial, la captación de clientes y demás, uno pueda contentarse con no tener demasiadas pérdidas al acabar el ejercicio. Una de cada tres 'startups' que se crean no superan el año de vida. De lo difícil que es superar esos primeros meses da idea la cantidad de artículos que se pueden encontrar buceando por internet sobre cómo sobrevivir a la incertidumbre del principio.

Pilar Tobella, la madre de Rosalía, no lo ha vivido así, entre otras cosas porque Rosalía era una apuesta segura. En enero del año 2019 creó una sociedad, Motomami SL, que ha ido (disculpen la broma) como una moto. En el primer ejercicio en el que ha presentado cuentas, la entidad declara una cifra de negocio que ronda los cinco millones de euros. Los beneficios, tras pagar el impuesto de sociedades, sueldos del equipo, deudas y demás, se quedan en 364.516 euros.

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Desde un primer momento, Rosalía y su familia decidieron embarcarse juntas en la carrera de la artista catalana. Su hermana mayor gestiona su relación con los medios de comunicación y sus estilismos, y su madre vela por los intereses económicos de la artista y es la 'jefa' de ese producto en el que se ha convertido todo lo relacionado con el talento de su hija.

Motomami SL se creó para gestionar "los servicios business management de artistas". En resumen, "las actividades relacionadas con representación de talentos de individuos o grupos. La negociación de acuerdos y administración de los intereses de los artistas con compañías discográficas, editoriales, agentes artísticos, managers, promotores musicales, productoras audiovisuales, esponsors, patrocinadores y marcas y objetos análogos. La contratación de conciertos y eventos. Coordinación logística y producción de conciertos y eventos. Management de artistas. Gestión logística y de agenda. Servicios de estilismo y asesores de imagen. Servicios de marketing, promoción y relaciones públicas. Servicios de community management, gestión de redes sociales. Asesoramiento, supervisión, consultoría y administración de los negocios del artista. Agente de Booking. Promotor musical. Producción artística y ejecutiva. Asesoramiento y dirección creativa. Acompañamiento y asistencia personal de artistas; y cualquier otra actividad relacionada con dicho objeto social y que tienda a los mismos fines".

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Tobella, la madre de Rosalía, no es una ignorante en este campo. Dejó de trabajar en la empresa familiar cuando Rosalía empezó a triunfar. Los Tobella Aguilera son cuatro hermanos, Jaume, María Teresa, Pilar y Lluis, muy conocidos en Sant Esteve Sesrovires, una pequeña localidad de Martorell a poco más de media hora de Barcelona, donde se crio Rosalía. Ninguno de ellos llevaba en los genes la tradición artística. Trabajaban en la empresa de su padre, Jaume Tobella Bosch, fallecido en 2019 a los 86 años.

La empresa, Suprametal, se dedica a la fabricación de placas de identificación, carátulas y etiquetas de metal principalmente. Todos los hermanos son socios, aunque dos de ellos administran solidariamente la compañía desde que no está su padre. Pilar era la directora comercial de la empresa hasta que su trabajo al lado de Rosalía la reclamó.

Aunque los números de Suprametal son buenos (en 2019 facturaron casi dos millones de euros), son mejores los de Rosalía. La artista, elevada ya al estatus de estrella internacional, cuenta con un equipo detrás de casi seis personas, tres empleados fijos y otros tres eventuales. Entre todos ellos, reparte una cantidad en salarios de 660.500 euros anuales.

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El importe neto de la cifra de negocio es de 4.822.139 euros. En el balance de cuentas se indica que hay 1.024.000 euros que aún no ha cobrado Rosalía por su trabajo, que cuenta con más de 800.000 euros en líquido y que ha pagado en torno a 24.000 euros en concepto de impuesto de sociedades. Dado que la empresa inició su actividad en fecha 1 de enero de 2019, no se han podido comparar estas cifras con las del ejercicio anterior, algo común en este tipo de informes y que sirve para ver la evolución de la compañía. Algo nos dice que hubieran sido positivas en cualquier caso.

La madre de Rosalía, en su calidad de administradora única, ha decidido reinvertir el beneficio obtenido después de cumplir con todos sus compromisos (364.500 euros) en la propia empresa. La cantidad se dedicará a engrosar las reservas de la sociedad, por si algún día a 'la Rosalía' no le va tan bien.