¿Quién es Renata Collado, la novia de Alonso Aznar? Fotógrafa, activista y clon de Tamara

Una fotógrafa y productora que ha vivido en Ciudad de México, Nueva York, Sídney y Namibia, donde trabajó intensamente con la fauna y la flora silvestres, así como con la educación de las comunidades locales. Su preocupación por el medioambiente la ha llevado a viajar por el mundo en busca de causas inspiradoras que documentar con su cámara.

Así se describe en su página web Renata Collado, la que, según afirma la revista '¡Hola!', sería la nueva pareja de Alonso Aznar. El semanal asegura que el menor de los tres hijos de José María Aznar y Ana Botella, "el prototipo de soltero de oro", está "ilusionado con su nueva novia, que reside en Madrid y con la que ya se ha dejado ver en público".

Esta exmodelo, con un gran parecido físico y de estilo con Tamara Falcó, centra sus esfuerzos en la defensa del medioambiente y en una entrevista asegura que sus referentes son la célebre primatóloga inglesa Jane Goddall –en una imagen de sus redes la vemos junto a un chimpancé y asegurando que quiere parecerse a ella "desesperadamente"– y la bióloga marina y exploradora estadounidense Sylvia Earle.

En su página de Linkedin también aparece como CMO de la empresa de servicios medioambientales con sede en Londres Eco-nnect, que pretende concienciar a la gente sobre los problemas de nuestro planeta y conectar entre sí a pioneros de proyectos sostenibles.

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Gracias a sus fotos de Instagram podemos apreciar tanto su pasión por los viajes como por la naturaleza, pero también por los deportes extremos, la playa y las reuniones con amigos.

Este noviazgo con Renata Collado sería el segundo que se le conoce a uno de los considerados como 'cachorros de la jet set madrileña', y al que en el pasado se relacionó con Ana Bono, la hija de José Bono.

Alonso Aznar trabaja actualmente para la empresa de inteligencia artificial Afiniti como director de Crecimiento y vicepresidente sénior y no parece tener intención de seguir los pasos en la política de sus padres ni de dejarse seducir por la fama y la atención mediática.

El joven empresario hacía oficial el pasado verano en Vanitatis que se marchaba a vivir a Washington, pero finalmente no pudo ser, ya que, según nos contaba él mismo, "no me dan el visado. Llevo intentándolo desde verano, pero no se está concediendo ninguno. Es imposible residir en EEUU".