Poderosas pero 'invisibles': las representantes más influyentes del talento español

Son mujeres poderosas e invisibles. Controlan las agendas más solicitadas de la escena patria (y en ocasiones, internacional), viajan por todo el mundo, no tienen horarios y, cuando no están al teléfono o respondiendo correos, ejercen como consejeras, estilistas de último minuto, hadas madrinas y hasta como amigas. Hablamos de las representantes detrás de rostros tan conocidos e influyentes como Blanca Suárez, Eugenia Silva o Nuria Roca, influencers como María Pombo y Grace Villarreal, presentadoras como Lara Álvarez y hasta aristócratas como Tamara Falcó o Brianda Fitz-James Stuart. 

Mujeres que apoyan a mujeres y han conseguido conducir su talento hasta el más absoluto de los estrellatos. Una cuestión en absoluto baladí si además tenemos en cuenta que lo han logrado haciendo malabares con sus vidas personales. Muchas de ellas son madres y en los embarazos han seguido con todo hasta convertirse en las absolutas reinas de esta industria. “No tengo pensado cogerme baja maternal, pero imagino que sí bajaré el ritmo para poder disfrutar de esta etapa y recuperarme”, nos confiesa Bea Villarroya, representante de influencers como Alice Campello y Alex Rivière, que dará a luz en los próximos días. 

Y no solo ella. Hablamos de Chus Martín y Dácil Romero, detrás de The Lab Talents, Daniela Rodríguez (Soy Olivia) y otras tan veteranas como Marta Porras (representante de algunas de las actrices más influyentes del momento como Blanca Suárez) o Juani Labrador, una de las pioneras en este mundo. Profesionales, fuertes, emprendedoras y luchadoras que practican más que hablan el feminismo, destacando en un mundo que otrora fuera solo de hombres, y abriendo la puerta a empresas integradas casi en su totalidad por mujeres en las que la conciliación, la feminidad y el feminismo son el pan de cada día.

Sara García del Prado y Adriana Pérez-Sierra, las fundadoras de Tandem Talents. (Cortesía)

Actrices del momento

Detrás de las grandes actrices del momento hay mujeres. Blanca Suárez (Paloma de Juanes), Paula Echevarría (Ana Tenorio), Esther Acebo o Michelle Jenner (Ana Belén Burgos)... Independientes, fuertes y con agendas imparables, Sara García del Prado y Adriana Pérez-Sierra, las dos representantes detrás de Tandem Talents, no dudan cuando les preguntamos sobre cómo han llegado a la cima de esta industria. “¡Con mucho esfuerzo! Siempre ha sido un sector especialmente machista donde al hombre se le daba más credibilidad y se le consideraba mejor gestor y con más talento que a la mujer. Eso a pesar de que siempre ha habido grandes mujeres profesionales en la industria. Pero desde hace poco vamos ocupando el sitio que nos corresponde, teniendo voz y pudiendo demostrar el talento que hay, aunque todavía haya mucho camino por recorrer…”, aseguran. 

Nos atienden entre llamadas y correos. Una de sus actrices es Paula Usero, una de las estrellas fulgurantes del momento. Fue nominada a un Goya este año y sus películas arrasan en taquilla. 

Su trabajo nunca para. No solo gestionan los contratos laborales que discurren por el camino de la interpretación, se encargan de sus redes sociales, patrocinios publicitarios y de mantener protegida su vida privada. Unas agendas non stop que dificultan más si cabe la por ahora complicada tarea de conciliar. 

“En mi caso no pude conciliar del todo vida profesional y personal hasta que mi socia y yo tuvimos nuestra propia empresa, donde le damos la importancia que se merece al tiempo con la familia, la logística del día a día y todo lo que no sea trabajo”, apunta Adriana Pérez-Sierra. “La cábala de agenda es muy interesante, sobre todo porque en nuestra profesión hay también trabajo en eventos, estrenos, festivales, etc, más allá de la jornada laboral establecida”. “Efectivamente, los horarios de esta profesión son muy locos”, continúa su socia. “Siempre he compartido con mi pareja que uno de los dos tenía que quedarse en casa para poder estar con los niños en las últimas horas del día, así que hemos tenido que hacer encaje de agendas”. Una conciliación conseguida en gran parte gracias a un equipo formado casi en su integridad por mujeres que también han conseguido aportar normalidad a una industria en la que lo superproducido era la norma general. 

“Creo que las redes sociales pueden ser utilizadas como una herramienta más de trabajo, y también pueden ser muy útiles a la hora de ensalzar valores o denunciar temas relacionados con la industria con los que no estamos de acuerdo o contra los que todavía hay que luchar. Siempre pongo de ejemplo a Inma Cuesta, que suele denunciar la distorsión que hacen algunas veces de su propio cuerpo en las fotografías destinadas a la promoción de su trabajo. Las actrices de nuestra cartera muestran al personaje y, si quieren, también se muestran ellas mismas al natural, 'sin producir', paseando a su perro, haciendo una tarta, bailando en su casa, jugando con sus hijos o haciendo deporte”. Como decíamos, un feminismo más de hechos que de palabras.

Beatriz Villarroya, fundadora de Mb11 Agency. (Cortesía)

El reinado de Instagram

Y si hablamos del poder de las mujeres en el mundo del cine, en Instagram, su reinado es indiscutible. Mujeres como Daniela Rodríguez, fundadora de Soy Olivia; Natalia Estebaranz y Lucía Losada, de Franca Studio y Wild Social, o Beatriz Villarroya, de Mb11 Agency, han levantado prácticamente de la nada una industria en la que los presupuestos para campañas mueven tantos millones de euros como seguidores acumulan sus representadas. María Pombo, María Fernández-Rubíes, Grace Villarreal, Lucía Bárcena, Alex Rivière o Daniela Figo son algunos de los rostros que cada día cuentan con su apoyo para desempeñar su trabajo.

 “Instagram se ha convertido en uno de los principales medios de difusión, es una plataforma que da voz a todas las personas con indiferencia de su sexo o condición. En el caso de la mujer (o influencer) ha permitido conectar de una manera más cercana y compartir experiencias, pensamientos y temas hasta ahora tabú. La mujer tiene la libertad de expresarse y mostrarse como realmente es y esa es la clave del feminismo para mí. El ser capaz de ser tú misma sin condiciones. No hay una manera correcta y/o concreta de ser mujer ni puede ser una cosa impuesta”, nos explica Beatriz Villarroya, fundadora de la agencia Mb11 Agency.

Con sede ya en Madrid y Miami, gestiona la carrera de talentos como Lucía Bárcena, María de la Orden, Alice Campello, Alex Rivière y la modelo Marta Ortiz. Una cartera de representadas que no solo arrasan en este medio en el que las mujeres han emergido como auténticas protagonistas, sino también como motor económico y de unión entre marcas y millones de consumidores. 

“Las redes sociales son un gran amplificador de cualquier tipo de mensaje. Creemos que no existe una contribución predefinida a ninguna ideología concreta, sino que la contribución es directa sobre el mensaje que cada uno quiere transmitir. En Wild hacemos mucho hincapié en la responsabilidad de nuestras representadas porque sabemos que todo lo que se cuenta tiene consecuencias directas (a veces positivas pero no siempre) sobre una gran audiencia”, señala Lucía Losada cuando le preguntamos sobre el paradigma de las redes y la naturalidad, quizá uno de los aspectos más criticados desde fuera. El abuso de los filtros, los retoques de las fotos o la continua apariencia de una vida idílica han afectado negativamente a adolescentes que no creen que su vida esté a la altura de la de los demás. Una idea que rechazan coralmente todas las entrevistadas. No es una cuestión de filtros, sino de sentirse poderosa. 

Natalia Estebaranz y Lucía Losada, fundadoras de Franca Studio y Wild Social. (Cortesía)

“Hablando por mí misma, como emprendedora y como persona que ha surgido de la nada, puedo decir que en ningún momento me he sentido reprimida por el hecho de ser mujer y creo que, si tú no lo sientes, puedes llegar a donde quieras. Si eso es lo que transmiten las mujeres en las redes sociales, ya está hecho y no hay que abanderar nada. Conozco a muchísimas mujeres que han llegado lejísimos y que, como yo, se han sentido siempre muy apoyadas por hombres que se sienten muy orgullosos de a dónde han llegado”, confiesa Daniela Rodríguez. 

En cuanto a la conciliación, a pesar de ser una industria en la que las mujeres ponen las normas, aún queda mucho por hacer. “A través de la experiencia de Lucía, madre de cuatro hijos, conocemos de cerca las necesidades de la conciliación. Por ello, tanto en Franca Studio como en Wild establecimos desde el principio una forma de trabajar flexible centrada en premiar el rendimiento con la libertad necesaria para que cada uno decida cómo quiere organizar sus días”, nos describe Natalia Estebaranz. 

De las cuatro, tres han trabajado estando embarazadas casi hasta el último momento. “Mentiría si dijera que siempre es fácil. Hay semanas donde es complicado… Son muchas horas de trabajo delante del ordenador, reuniones, en ocasiones viajes, donde por supuesto estás sacrificando otros aspectos de tu vida, pero me encanta lo que hago y eso me motiva a seguir adelante y perseguir mis sueños”, reconoce la fundadora de Mb11 Agency, que en apenas unos días dará a luz a su primera hija, Mika. “Ahora que llega mi hija en menos de un mes, es un momento de ajuste donde realmente agradeces tener un equipo a tu lado de confianza, con el que crecer de la mano y que te da soporte, y un marido que me apoya en todo. Sola sería imposible”. 

Nuevos iconos de estilo

Un asunto, el de la conciliación, que también hemos abordado con Chus Martín y Dácil Romero, fundadoras de The Lab Talents y representantes de Tamara Falcó, Vicky Martín Berrocal, Nuria Roca, Blanca Padilla y Eugenia Silva, entre otros. “La conciliación es exactamente igual en todos los sectores. Es verdad que en nuestro caso igual lo tenemos algo más difícil porque estamos 24 horas al día, 7 días a la semana”, sostiene Dácil. “Si tú estás apoyada por un buen equipo, todo es más fácil. Yo no tengo hijos, pero cuando Chus lo necesita estoy yo, y al revés lo mismo. Al final, la fuerza hace la unión y eso ayuda un montón, y no solo me refiero a la cuestión familiar sino también al trabajo”, agrega. 

Una conciliación de la vida personal y laboral que también facilitan a sus representados: “Ellos también tienen que conciliar su vida personal con su marca personal. Son muchas caras de un cubo”.

Chus Martín y Dácil Romero, junto a Tamara Falcó. (Redes)

La mayoría de ellas tienen hijos y no solo eso, sino que pasan la mayor parte del tiempo viajando, con horarios imposibles que abarcan desde sesiones de fotos a primera hora de la mañana a fiestas y eventos de noche que sus representantes regulan con precisión casi matemática. 

“Lo que prima en España son las mujeres trabajadoras y reales”, nos explica Chus. Y eso es exactamente lo que son, por ejemplo, Vicky Martín Berrocal y Nuria Roca, dos de las mujeres más seguidas en redes sociales de nuestro país: “El éxito de ellas dos es el trabajo. Son mujeres muy trabajadoras con carreras muy largas y siempre han trabajado de manera constante y dura”. Eso y su naturalidad permanente. 

“Cuando la publicidad, hace 30 años, estaba más dirigida por hombres, el icono de la mujer correspondía a un arquetipo de belleza absoluta y ahora no”, añade Chus. Un paso adelante en una industria en la que, al contrario de lo que se piensa, no es todo postureo. Detrás de cada talento hay un equipo de personas que abarcan desde el fotógrafo al estilista, pasando por el videomaker, el maquillador, el gestor de redes sociales… Una orquesta de profesionales que las representantes dirigen para que todo salga perfecto. "Detrás de cada foto de Instagram, de cada evento para prensa hay una estrategia, un estudio de marca, planes de comunicación, un desarrollo de negocio online, offline… No hay nada al azar y eso requiere un esfuerzo enorme", admiten. 

Un esfuerzo llevado a cabo por mujeres para ensalzar a otras mujeres que han convertido el consumo en un círculo virtuoso que mueve cientos de millones de euros al año.