Julia Janeiro se rebela contra las acusaciones de hipersexualizarse en redes

El 18 de abril, día de su mayoría de edad, supuso un antes y un después en la vida de Julia Janeiro, la hija de Jesulín de Ubrique y María José Campanario. La joven decidió convertir sus perfiles en redes sociales en públicos y comenzó a acaparar noticias, portadas y titulares; en definitiva, se convirtió en personaje público.

Gracias a su nombre y repercusión, sus seguidores no han dejado de crecer y ya alcanzan los 183.000 en Instagram. La hija del torero ya puede ser considerada una auténtica influencer, profesión con la que parece estar encantada y que intenta explotar al máximo. Sin embargo, su contenido no parece ser del gusto de todos. Julia ha sido duramente criticada en varias ocasiones por publicar fotografías en bikini o con pantalones cortos y tops ceñidos.

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La hermana de Andrea Janeiro explotaba contra los usuarios por sus múltiples ataques machistas. En sus stories publicaba algunos de los mensajes que le hacían llegar: “Eres muy joven para desnudarte tanto en redes sociales por ganar seguidores. Respétate y si no, luego no llores ante las críticas. Es un consejo como mujer”, le escribía una de sus seguidoras.

Julia Janeiro, lejos de tomarlo como un ataque personal, extrapolaba este hecho al movimiento feminista y se lamentaba de la falta de apoyo y sororidad que practican algunas mujeres. La joven decidía lanzar un alegato y reivindicaba la libertad de utilizar sus redes sociales y mostrar su cuerpo de la forma que ella considere correcta: “Mensajes así me llegan continuamente. Para empezar, como mujer, puedo hacer y enseñar lo que me parezca o no. Como mujer, puedo tomar las decisiones que vea convenientes, y como mujer, muchas de vosotras tendríais que evitar hacer este tipo de comentarios dañinos hacia otras mujeres. Queréis respeto e igualdad, pero entre nosotras somos las peores”, sentencia.

Además, la hija del torero hacía un ejercicio de reflexión sobre la necesidad de establecer un cambio social para frenar este tipo de comentarios que, según cuenta ella, en su mayoría, los recibe de parte de mujeres que por edad podrían ser perfectamente su madre o su abuela.

Ser un personaje público conlleva estar expuesta en redes sociales y ser sometida a un juicio público día tras día. La joven afirma ser consciente de estas consecuencias, sin embargo, manifiesta que no todo vale. Los comentarios negativos no solo proceden de redes, sino que varios medios y programas de televisión también han reprochado a Julia Janeiro que se muestre ligera de ropa en sus redes sociales, y hay quien considera que solo lo hace para ganar seguidores.

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No podemos obviar que, desde que cumplió su mayoría de edad, la hija de Jesulín se ha convertido en uno de los personajes más perseguidos de la prensa del corazón. Ella aún no ha realizado ninguna declaración y ha confesado que no tiene intenciones de construirse un camino en el mundo de la televisión; quiere seguir con sus estudios y desea mantener a las cámaras lejos.

La polémica con Carmen Lomana

No son solo usuarios anónimos los que han opinado sobre el estilo de la Julia Janeiro, personajes tan conocidos como Carmen Lomana también lo han hecho. “Que alguien le diga a Julia Janeiro que no se puede ir vestida de negro con escote hasta la cintura un domingo por la mañana. Solo tiene 18 años y está enseñando demasiada carne. No se puede ser más vulgar”, escribía en Twitter la colaboradora de televisión, unos comentarios que desataron la ira de las redes, que la acusaron de machista.

Que alguien le diga a Julia Janeiro que no se puede ir vestida de negro con escote hasta la cintura un Domingo por la mañana...solo tiene 18 años y está enseñando demasiada carne .no se puede ser más vulgar.
Maquillaje, uñas, un horror

— Carmen Lomana (@Carmen_Lomana) April 19, 2021

A pesar de ello, la empresaria no se desdijo y defendió el que, según ella, es el camino más correcto para la hija de Campanario y Jesulín: "¿No estábamos en aquello de terminar con la excesiva sexualización de las adolescentes y cosificar a la mujer como un objeto de placer mostrando su cuerpo para vender un coche, un perfume, o unos bombones? ¿No sería mucho más lógico motivar para que estudien, sean mujeres cultas, con criterio para triunfar en la vida por su inteligencia y forma correcta de comportarse?".

Carmen Lomana afirmaba así que en este tema el papel de los padres y la educación es fundamental: "Creo que alguien debe decir y dar unas pautas de comportamiento y saber estar, qué es correcto en la vida y en los estilismos dependiendo de la hora y el lugar. Esto se llama educación y deberían ser sus padres los que se lo inculquen. La educación y las maneras no cotizan al alza".